De por vida???

Dicho así asusta. Hubiera sido más fácil para ella no decirlo, por lógico que parezca a poco que se piense. Qué necesidad tenía Soraya de recordar que el mundo se mueve por medio de los cambios, de las transformaciones, de las modificaciones... de las reformas. No en balde, aunque sean éstas las que nos saquen finalmente del boquete por mucho que nos estén jorobando la vida mientras se aplican desde el Gobierno, es cierto que el vocablo ha sido satanizado a fuerza de estar ya hasta el gorro de apreturas.

La reforma laboral nos tiene a las patas de los caballos tras haber perdido todo derecho a casi nada. La educativa, la fiscal, la financiera... En fin, si ya sabíamos (que lo dijo Rajoy en Nueva York hace un mes) que la agenda de reformas no está agotada, es cierto que aguardábamos la llegada alguna vez de un final del cinturón ajustado al que cada dos días le hacemos un taladro nuevo para la hebilla. Pero llega ayer Sáenz de Santamaría a Jerez y dice aquello de "hemos de acostumbrarnos a esfuerzos reformistas de por vida".

Le bastaba con sumarse a las voces que, desde los análisis generados en el seno del XVI Congreso Nacional de la Empresa Familiar que la vicepresidenta vino a clausurar a Villamarta, menudeaban el mensaje de la luz al final del túnel, del crecimiento de la economía y de un 2014 que parece prepararse para ir dándonos las alegrías que hace tiempo se nos están hurtando por culpa de la puñetera crisis. Pero no, Soraya tenía que recordarnos que este talante es, como predica El Canto del Loco, para siempre.

El Canto Del Loco – Para Siempre