sábado, 19 de diciembre de 2015

Aunque sea por hacer silencio

Es sábado de reflexión. Pero reconozco que lo que ocurra mañana en las Generales no dependerá de lo que nos hayamos parado a pensar hoy. O sí? Quizá convenga tener en cuenta que hablan de un 40% de voto indeciso hasta prácticamente las puertas de la jornada electoral de este 20D. Pero qué han hecho los indecisos con este día? Me temo que no mucho que tenga que ver con qué papeleta vayan a meter en la urna.

En fin, sé que el sentido de este día nacido de la dinámica que el regreso de la Democracia a España puso en marcha ha caído en algo parecido a esa obsolescencia programada con que se fabrican los electrodomésticos. Ya está amortizado su uso y hemos perdido el respeto al cese de mensajes que pidan el voto. Un paseo por las redes sociales ha puesto de manifiesto que se ha perdido el pudor y ya es curiosa reliquia la condición de este sábado.

Un amigo me ha recordado aquellos países europeos que no tienen víspera de reflexión cuando les llegan comicios. Hágase pues, si es preciso, y sea abolida. Mejor eso que incumplir aquello que nos dimos en su día. Porque es cierto, no creo que haya quien realmente reflexione. La conversación con Antonio me lleva a augurar el final de esta práctica. Al menos que sea vía oficial y así no tendremos la sensación que se esté incumpliendo nada.

Y con todo, me joroba llegar al domingo sin el cese real de la campaña. De hecho, las imágenes de Rajoy corriendo, de Sánchez con la mujer, de Garzón ofreciendo churros a los periodistas, de Iglesias con un niño en brazos o de Rivera paseando son, realmente, mejor mensaje que escucharlos hablar. Pero qué hay de ese beneficio casi balsámico que tenía el silencio político que tenían las jornadas de reflexión cuando se respetaban?

Por el amor de Dios, aunque sea por hacer silencio, por terapia desintoxicadora! Llegar ante las urnas sin estridencias, serenos... Que el domingo será largo! Que la chicotá postelectoral nos volverá a traer de cabeza! Que en un mundo con tanto ruido como éste nos viene muy bien una calladita política de todos, infantería internauta de todos los colores del espectro incluída, para que la salud democrática no se vea marcada por la saturación!

domingo, 29 de noviembre de 2015

Y tú qué esperas?

Que los brotes verdes lleguen al fin a tu bolsillo? Qué te tengan en mejor consideración en tu puesto de trabajo? O quizá baste con tenerlo, con tener empleo? Superar tu delicado estado de salud? Salir de ese pozo en el que, quizá, emocionalmente te encuentres? Que tu hijo saque mejores notas? Que la vida pegue el giro que necesitas? O tener la fuerza para ponerlo tú mismo en marcha?

Ves porqué el Adviento que hoy comenzamos a celebrar los cristianos... lo por venir... lo esperado... no es sólo para nosotros? Quién no tiene algo que esperar? Quien es tan desdichado que ha perdido toda esperanza? A ti no te parece que conservarla... que alentarla... bien merece una reflexión? Una repensada? Esta batería de preguntas a la que espero que te hayas quedado sin temer la aparición del "Gaby cristianito"?

Hoy se inicia esta preparación de la Navidad. Lo hacemos en la oscuridad no ya de las calles de Jerez, al aguardo del alumbrado habitual que este año se retrasa, sino inmersos en otras que cada cual ha de examinarse. Todos. Incluso los que creen estar preparando la llegada del solsticio de invierno. La mayoría, tan laicos como casi todos pero nada embriagados por posturas de escaso recorrido, tenemos la mente puesta en otra cosa!

martes, 10 de noviembre de 2015

Basta ya!

Decir que la violencia es cosa de hombres es una felonía. Y no conocernos. Y no querer conocernos. Y negarse la adhesión de los varones a una causa que es de todos y que sin nosotros está condenada al fracaso. O es que sólo hay disposición de aceptar la coalición con los hombres capaces de aguantar sin pataleo ser tachados de violentos potenciales? "Mire usted, que ese señor es un bendito!", puede alguien alegar con razón aunque es posible que reciba la siguiente respuesta: "Ya saldrá la bestia que lleva dentro, cuestión de tiempo".

No. La violencia no es cosa de hombres. La violencia es cosa de cabrones, de delincuentes, de personas (si es que se les puede llamar así) que no han aprendido qué es una relación de pareja. Y toca espabilarse. Todos. Mujeres y hombres. Que todos los asesinos de los episodios de violencia de género a lo largo de 2015, o en cualquier otro año, sean hombres no invita a generalización ninguna. Han sido unos cuarenta entre unos veinte o treinta millones de hombres españoles. No os dais cuenta que erráis preocupantemente cuando formuláis la cuestión en esos términos.

A partir de ese postulado parece preciso, en efecto, que vayamos a ese pacto de estado que he oído en varias instancias durante estos días y que también yo considero necesario para abordar las soluciones que sea menester. Acciones policiales, los tribunales, las campañas de concienciación y todo lo que sea necesario llegue urgentemente. Todos contra la violencia machista. Todos contra todas las violencias. Todos en la lucha desde la sensatez y la suma de voluntades. Todos apartados de las generalizaciones. Todos. Todos.

sábado, 7 de noviembre de 2015

Rebelado contra el corrector de WhatsApp

Conversación de besugos, verdad? Pero la culpa es nuestra. Hemos dado galones a un mecanismo perverso. Y el resultado es un empeño tecnológico por enmendarnos la plana que a mí personalmente me toca las narices. Con todo habrá que reconocer que es cierto que nos lo merecemos. 

Me permito colectivizar la explicación, porque clama al cielo comprobar cómo escribimos a nivel general. Cuando no hacemos lo que debemos por nosotros mismos siempre llegará alguien, o algo, a quien habremos dado el indeseado placet para que haga con nuestro lenguaje lo que quiera.

La incorrección de nuestro lenguaje escrito en redes sociales en este tipo de comunicaciones rápidas es tal que hemos permitido que se nos impongan correcciones a las que, encima, hay que aguantarle sus propios errores. A inventar ahora el corrector del corrector de este infernal artilugio.

Nuestra lasitud ortográfica, gramatical, sintáctica y linguística en general ha producido, por la vía de ejemplos como el de la captura de pantalla que ilustra mis líneas, las más sonoras broncas. Alguna persona de mi entorno ha llegado a decirme aquello de "no volvemos a hablar por WhatsApp!"

Y ahora llega la Real Academia Española de la Lengua y valida palabros como 'almóndiga', 'toballa' y 'asín'. Y cómo olvidar aquel intento del acento en el 'solo' y la imposible diferenciación a partir de ahí del sinónimo de 'solamente' respecto al 'solo' adjetivo. Ten académicos en la RAE para ello.

Y yo me acuerdo de los hermanos Juan José, Eladio o Teodoro, de don Juan de Dios, don Pedro y quienes en aquel San José de los años setenta tanto pusieron de su parte para que aprendiéramos lo que ahora comienza a derrumbarse. En fín, lo llaman evolución de la lengua. Yo lo llamo otra cosa. Y tú?

martes, 3 de noviembre de 2015

Ni a los muertos vais a dejar tranquilos?

Una cortinilla que tape una vidriera dedicada a la Virgen en un tanatorio, del modo más digno posible siempre, no deja de ser una solución medianamente tolerable de permitir que quien no tenga credo alguno se pueda morir sin el temor de conmoción fervorosa en torno a su féretro. 

Una ordenanza municipal que impida una cruz en el nicho que acoja a un cristiano en un cementerio, si os digo la verdad, sí que me parece meterse en camisa de once varas. Como impedir un signo judío o musulmán en el enterramiento de quien correspondiera en cada caso.

Alguien me quiere explicar porqué hay que joder no sólo la vida de una persona confesionalmente comprometida sino también su muerte? La vocación de trascendencia que subyace en todo corazón religioso cobra su dimensión más evidente en el momento del fallecimiento. Cómo os atrevéis a llegar a esto?

Pero me parece bien que el laicismo (la laicidad es otra cosa) patine de ese modo y se diferencie cada vez más del principio noble, y mucho más democrático, por el que todas las convicciones, incluso el ateismo, aprendan a convivir sin recortarse unas a otras signo ni visibilidad alguna.

Dejad a los muertos en paz. Hacedle ese favor al mundo. Y que aquél que se marche en la esperanza de que le aguarda un cielo poblado por quien se tercie, en función de su credo, quede en el recuerdo de sus seres queridos junto a la cruz, la media luna o la estrella de David. 

Un cementerio en el que se sumen todos los signos es, en el fondo, la mejor muestra, y es un planteamiento personal, de esa sociedad laica que, mientras sean formuladas ideas peregrinas como algunas de las que estoy escuchando estos días, será aún menos probable entre los vivos.

domingo, 1 de noviembre de 2015

Todos los santos tienen novena

El refranero popular tiene la expresión adecuada para dejarnos tranquilos y asegurarnos que nunca es tarde, que siempre estaremos a tiempo. De qué? De lo que sea, probablemente de cualquier cosa! Así que ve poniendo ejemplos, que hoy se me ocurre ponerte a pensar, querido compañero en el camino de mis reflexiones, seguidor que te sumerges en la blogosfera para leerme cosas que pueden gustarte o no pero que siempre asoman desde mi honestidad.

Y hoy es, en efecto, el día de Todos los Santos. Se trata de un gesto lleno de cierta humildad eclesial al formular la idea de una santidad al alcance de todos, sin patentes de corso arrogadas por nadie que pretendiera decidir quién es digno o no de ser elevado a los altares. Y los ejemplos declarados son necesarios, pero no excluyentes de tantas otras vidas admirables que a diario nos rodean. Y los no reconocidos tienen su día. Éste!

Si cada santo tiene su novena establecida como margen de maniobra para desdecirnos de olvidos o errores nuestros sobre la condición de personas que tenemos cerca, lo cierto es que toca ir repasando algunos 'santos' que yo, que no reparto declaraciones de canonización, sí me permito tener en cuenta en un día como éste. Así que id superando la resaca de la noche en la que 'jaloguín' os ganó (si fue el caso) y vayamos a lo esencial de este primero de noviembre.

Por ejemplo, y al inicio del camino hacia el 25N, vayan mis declaraciones primeras para quienes sufren violencia de género u otro tipo. Nunca más. Nunca más! Mujeres y hombres juntos contra ello, pese a ciertas tentaciones que dejen caer políticos de cortas miras. Mañana será el día de los Fieles Difuntos. Y a los que personalmente más me duelen sumo ya a las 38 mujeres que han sido asesinadas durante lo que va de 2015 en toda España. Descansen en paz.

Y sumo a los padres de familia que se parten el alma en el empeño de llegar a fin de mes. Y a los abuelos hospitalarios que acogen en casa a hijos parados y nietos. Y a quienes se multiplican en acciones de voluntariado sin apoyo de la administración. Y a los políticos que, como está el patio, no acallan su vocación de servicio público y lo ponen en marcha sin tentaciones execrables. Y a los profesionales entregados aunque el sueldo no justique el dispendio. Sigue tú...

sábado, 17 de octubre de 2015

A propósito del veto

Razones muy obvias me colocaron el viernes en lugar próximo a la noticia de un veto periodístico. El alcalde rechazaba la invitación de un medio alegando ofensa que, de existir, lo era a nivel personal sobre su formación y no agravio institucional alguno. Y, desde luego, jamás nacida en la instancia a la que negaba la entrevista pretendida por mi compañero.

No quisiera valorar más allá de lo justo la torpeza que, analizado el asunto desde la perspectiva profesional que cualquier estrategia de comunicación reclama, supone un veto en pleno siglo XXI. No creo que haga falta. Tampoco me adentraré en lo sorprendente que resulta llegar al frente de nuestras instituciones públicas con cualquier falta de información como la denunciada.

Me quedaré en la puridad de un debate que, diferencias ideológicas a un lado, deja con el culo al aire a quienes, abanderados de lo que llaman democracia real, terminan haciendo que la vuelta de tuerca con pretensiones de pasos de futuro nos lleve de nuevo a posiciones añejas y rancias, desprovistas de toda legitimidad y carentes de toda lógica que ahora nos entre en la cabeza.

A partir de ahora, señor González, sólo cabe una cosa. A mi humilde entender, al menos. Y me cargo de todo respeto para dejarlo dicho: no dilate usted más ni el levantamiento del veto a mis compañeros de Cope-Cádiz ni el cara a cara con Carlos Herrera. Hágase un favor a si mismo y recupere al menos una parte del crédito perdido con esta historia concreta. En otros blasones que ya atesore... ni entro.

lunes, 12 de octubre de 2015

Mi españolidad

Tanto el título como la foto ya han provocado rechazo a algunos de partida. Seguro. Me bastará, en cualquiera de los casos, que con ira o con complacencia se me lea sin necesidad de hacer definitiva la apriorística etiqueta. Item más... los que, en un sentido o en otro, dejen de leer esta entrada en el blog antes de adentrarse en mis nobles inquietudes al respecto quizá estén demostrando, salvo que no tengan tiempo para ello, lo poco que tienen que aportar a un debate que va más allá de la catalanidad y el dichoso Mas.

Déjame que te hable, primero, de mi preocupación ante los 'profesionales' de la agitación gratuita de banderas. El otro día me sonreía, de hecho, escuchando en la radio a alguien que, con mucha gracia y no menos respeto por todas las opciones, señalaba haber constatado que no hay reivindicación, aunque sólo sea la concentración contra los baches no arreglados por el ayuntamiento de turno, en la que no aparezca una enseña republicana. También ocurre al revés. Venga o no a cuento la exhibición de marras.

Lo cierto es que no puedo evitar sentir, desde mi rincón andaluz, que me unen muchas cosas con esos catalanes que viven sus días en la encrucijada de una lamentable división que da pena especialmente en sociedad tan espléndida como lo es la de esa tierra maravillosa. En el Priorat, Maresme, Alt Ampordá o el Vall d'Arán no pocos estarán más cerca de mi pensamiento que alguno de mis vecinos en Jerez. O en Vigo, Medina de Rioseco, Irún, Calatayud, Aranjuez, Benidorm o Zafra. Las divergencias no se anclan en el territorio necesariamente.

Mi españolidad, exhibida sin temores en éste que llaman Día Nacional y que a la postre no es más que un lunes festivo en el que procurar ser feliz, existe sin duda alguna y es lo que es con tanta convicción como la desafectación necesaria para que cunda lo que nos une y no lo que nos diferencia. Mi españolidad es fuerte hasta donde lo puede ser, en este momento de mi vida, la más firme seguridad que tenga a mi alcance. Y también es respetuosa con quienes por respetarla (mi españolidad) demuestren merecer este respeto.

Mi españolidad es de verdad, no sólo un trozo de tela. Mi españolidad es comprensiva con todo aquél que argumente y también me escuche. Mi españolidad es dialogante porque nunca llegaron lejos las imposiciones. Mi españolidad es tolerante porque lo otro no merece la pena. Mi españolidad es exigente de las mejores virtudes humanas. Mi españolidad es, de hecho, una virtud y nada me convencerá de lo contrario una vez expuesto qué es para mí la españolidad. Ergo... mi españolidad es, desde mis postulados, inquebrantable!

lunes, 5 de octubre de 2015

Dueño de mis silencios

Nunca he sentido, en la crudeza que se le supone, la esclavitud de mis palabras. Y siempre me he expresado, me expreso y me expresaré con la libertad que me caracteriza. Pero eso no quiere decir que siempre que me parezca oportuno me considere dueño también de mis silencios. Demasiado solemne para recuperar tras mes y pico mi actividad en el blog, verdad?

Es cierto, la incorporación a la nueva temporada radiofónica y otras ocupaciones laborales me apartaron de la fecunda escritura estival que me tuvo, pico y pala, analizando especialmente el tránsito en el gobierno local jerezano y otras cosillas varias. Pero ya estoy aquí de nuevo, con las ganas que nunca perdí, presto a 'dar morcilla' a quien corresponda en cada caso.

Uno no sabe nunca, aunque nada me sorprende, quien se considera seguidor de este puñado de letras que cada vez que puedo esparzo en mis artículos. Y hoy debo descubrirme ante un concejal socialista del que me siento deudor. José Antonio Díaz me pidió hace unos días que volviera a la carga. Y yo le agradecí que valorara mi "manera muy particular de escribir".

Yo le puse en bandeja que me citara los temas que le apetecía que analizara. Él me señaló tres de los muchos asuntos que le quedan cerca en función del lote de la gestión municipal que se le concediera. Ya me iré adentrando en sus propuestas. Ahora, disculpen mi flojera, sólo me apetece desperezar el pensamiento crítico e ir dando pábulo a mi motricidad fina.

Me alegro, como dice Herrera todas las mañanas. Lo dicho, el 'libro de baile' lo tengo abierto. Se aceptan peticiones. Algunas de las más inmediatas que atenderé, para que después no digan, son del socialista Díaz. Eso sí, las palabras seguirán fluyendo sin miedo a que me esclavicen y cuando toque silencio... será que me he vuelto a quedar sin tiempo.

sábado, 29 de agosto de 2015

Oxitocina para todos

El nervio vago reacciona cuando llega la ocasión. Es respuesta cerebral de origen homínido que nos permite identificarnos unos a otros de modo prácticamente inconsciente y, por lo tanto, sintiendo con el otro que aquello que encontremos en común sugiere parentesco no imprescindible realmente para que asome la deseable compasión. Y si no lo conocemos de nada siempre se viste de decisión inmediata sobre si nos cae bien o no. Empatía, lo llaman.

La hormona que se genera en ese proceso se llama oxitocina y, a la vista está, es clave para las relaciones interpersonales más allá, porque la primera impresión es importante siempre, de lo que el entendimiento disponga más tarde. No es bueno hacerse ilusiones baladíes pero... y si todo aquello que nos asquea del mundo no se debe expresamente al irregular reparto de recursos que origina el hambre, la lucha por el control del petroleo o las guerras tribales?

En las distancias cortas podemos encontrarnos o desencontrarnos en esas diferencias ideológicas que enfrentan a las personas en el terreno político o religioso. O en la convivencia familiar, laboral y vecinal encontramos a diario los signos visibles de aquello a lo que la carencia de la mencionada hormona nos puede conducir. Oxitocina nos debe faltar cuando la discusión se agría, en redes sociales por ejemplo, cuando toca debatir los temas más candentes.

Oxitocina para todos, que el hombre (siii, la mujer también) lleva miles de años aquí y algún día deberíamos terminar aprendiéndonos la copla de aquello que es tan consustancial a la situación hacia la que la evolución nos ha traído tanto tiempo después. Mensaje para quienes se lo preguntan en este momento: sí, todo viene por un bonito documental de La 2 que acabo de zamparme. Y a todos, a segregar esa cosa que nos permita ser un poco más felices.

lunes, 24 de agosto de 2015

Mesas para qué os quiero

Acabo de levantarme recién cenado. No hemos arreglado el mundo mientras comíamos, tampoco hemos arreglado ninguno de los problemas más domésticos que nos acucian... pero hemos hablado, en torno a la mesa, de lo que a lo largo del día no hemos sido capaces. Quizá más por no haber sabido encontrar el modo en la dinámica cotidiana de idas y venidas que porque no exista la posibilidad más allá de esas sentadas con horario fijo y platos por delante.

Y McCann y MRM/McCann, creadores de la nueva joya publicitaria de Ikea, han sabido dar en el clavo. No me dan comisión los suecos pero, cuando un anuncio me atrapa de verdad, o es de la famosa compañía de muebles o es de Coca-Cola. Apenas un par de empresas más me parecen tan habituales en esos niveles de calidad que impiden aprovechar los intermedios (así se llamaban en los tiempos del VHF y el UHF) para ir a miccionar.

El spot está protagonizado por la mesa del despacho oval de la Casa Blanca. A lo largo del mismo este poderoso lugar de toma de decisiones de interés mundial relata su envidia por las mesas de los hogares normales donde se cuecen asuntos cotidianos y se disfrutan comidas familiares. El anuncio de bodas, la decisión para la compra de una vivienda o el conocimiento de las notas de los niños pueden ser o no los argumentos que aparecen pero cabría todo ello.

Ahora, al girarme y mirar nuevamente la mesa que acaba de ser recogida de platos, cubiertos y otros elementos de la cena, puedo reproducir mentalmente qué hemos hablado en ella. Como al llegar al dormitorio y mirar la que sustenta el ordenador en el que escribo evoco fácilmente mis reflexiones sentado ante ella. O aquella que me espera en la redacción de la radio se llenará de papeles, de decisiones sobre temas que ocuparán mis notas, la antena...

Vender mesas, que es algo que sin este anuncio parece insustancial salvo por la facturación correspondiente, alcanza una dimensión insospechada por obra y gracia de la nueva tendencia que pone experiencias al alcance del comprador. Y, sin embargo, lo sorprendente ahora es no haber reparado convenientemente en que lo lógico, pese al individualismo imperante, es vender mesas que nos reúnan más que sillas que, de una en una, sigan aislándonos.

jueves, 20 de agosto de 2015

Aún me queda una semana, afortunadamente

Comienzo a bajar de mi mirador vacacional. Lo haré en un plis plas consciente que no me veré en otra igual hasta dentro de mucho. Y ahora, a una cierta distancia de esa silla desde la que ver el movimiento del mar plácido de un verano que no es otro más, toca cambiar de panorama. Y también de asiento.

Así, y tras haberme inoculado el estrés conscientemente, es cuando me digo: "Aún te queda una semana, Gaby!" Miel sobre hojuelas. Sólo a partir de ahí reconduzco con una inyección de optimismo, eso sí, mi propósito de ir asomándome a una nueva temporada de actualidad a todos los niveles.

En Jerez, incrementando su deuda con algún crédito ICO de ésos a los que los socialistas hacían ascos hasta que, gobernando ahora, abrazan también al ministro Montoro. En la provincia, dejando atrás un verano turístico que parece bueno. Y en Andalucía, testándose aún ese PSOE+Ciudadanos que nos toca al frente.

Pero llegará el final del otoño con esa enésima convocatoria electoral y, a ver qué ocurre en Cataluña antes, comprobar en Rajoy aquella máxima de las barbas puestas en remojo en función de lo que se va viendo en los anteriores comicios. Y las Generales llegarán con Jerez deseando aferrarse a los carrizos hasta cerrar año tan jartible.

Aún me queda esta silla al borde del mar sin embargo. Muy pronto he bajado de ella. Y lo he hecho hoy, creo, con ganas de cambiar de aires al fin, de volver al tajo. Pero visto que queda una semana para mi incorporación y, sobre todo, visto lo que me espera a la vuelta... subo de nuevo! Que se mueva el mar. Ya me tocará hacerlo a a mí.

lunes, 17 de agosto de 2015

Miedo, asco, tristeza, ira y alegría

He conseguido reunir ese abanico de emociones atendiendo estos días a algún que otro informativo de la tele. Y, hasta en vacaciones, las relaciones interpersonales han dado para un poco de todo ello. Por no pensar en lo que me espera una vez me incorpore a la actividad laboral y llegue de nuevo el momento de contar en la radio la actualidad más cercana. En el fondo, sean mezclados según la situación o vividos de uno en uno, estos sentimientos son la sal de la vida y el modo de encauzar cuanto nos pasa a diario.

El último producto de la factoría Pixar está en cartelera con el título 'Del revés' y, aunque no termino de entender el sentido de ese modo de llamar en España la original 'Inside out', la película se convierte en un acertado modo de explicar los mecanismos de nuestro cerebro. Cinco personajes se convierten, en la 'mesa de control' de la cabeza de una niña en tránsito hacia la pubertad, en los protagonistas de las tantas veces inexplicables reacciones de edad tan convulsa. Las pugnas entre ellos son toda una aventura digna de atención.

No creo que se trate de una película para niños. Y, por mucho que la exquisita capacidad creativa de sus autores ponga en liza una propuesta visual muy atractiva para ellos, lo cierto es que tendría que ser proyectada a los futuros neurólogos, psicólogos o psiquiatras que pueblan las correspondientes facultades del ramo. Item más, creo que han de verla padres con hijos en ciertas edades, personas dedicadas al trato con el público, curiosos de los intríngulis del pensamiento y adultos en general.

La actividad de la conciencia, el negro subconsciente, los recuerdos cotidianos y también los esenciales, las 'islas' de nuestras preferencias, los mecanismos de interconexión neuronal, las disfunciones y las resoluciones, las pugnas entre la alegría (líder del grupo en la evidencia optimista de la trama) con la tristeza (descubriendo finalmente su verdadera importancia), el miedo (tembloroso e inestable a cada paso), el asco (presto siempre a ejercer su papel) y la ira (explosiva, incendiaria...). Todo ello está en 'Del revés'.

Actuar tras verla quizá conduzca, imaginando procesos tan desconocidos por la generalidad, a contemplar posibilidades de mejora llevados de la mano de un personaje que, visto lo visto, es, más allá de convicciones de boquilla que tan a menudo podemos barajar, verdadero director de las mejores motivaciones vitales. En manos de la alegría comienza a ponerse este propenso a la melancolía que, tal vez, sea capaz de lo mejor en adelante. En la peli ella puede resolver el desbarajuste generado por los demás. En la vida real también puede.

domingo, 16 de agosto de 2015

La playa

El sol veraniego torra y castiga la piel de modo consciente si nuestra pigmentación no ayuda o de modo inconsciente si, por morenitos ya, nos creemos inmunes a su daño. La arena quema si está suelta y es molesto compañero de desplazamientos cuando viaja entre los dedos de nuestros pies. El salitre termina originando picor hasta que felizmente conseguimos que la ducha al regreso, o en la misma playa si está bien equipada, nos limpia no solo de su presencia sino también del recuerdo de sus molestias.

Todo ello, y también la necesidad de cargar con sombrilla y sillas o con nevera y otros pertrechos (atrás queda la estampa de nuestros padres como porteadores serpas con esa sandía a los hombros antes de quedar enterrada en la arena y con la pesadez de esos niños que éramos entonces) explican porqué un buen amigo como Javier Fernández Martos (en la foto) me dice aquello de "es mi martirio de cada verano, no lo veo nada bueno". Y hasta soy comprensivo y me reprimo de afirmar que lo ha probado poco. O te lo dije, fratello?

Mi amigo me va dejando en sus frases, con seco gracejo rondeño que exhala de modo inmisericorde cuando mi provocación aparece, algo que estoy seguro tiene presencia en la mente de todos. Que nos hemos vuelto comodones. Y prometo que es cierto que mientras leo y respondo en redes sociales al entrañable contertulio estoy escuchando 'La playa'. La Oreja de Van Gogh me cuenta una bonita historia desarrollada tiempo ha sobre la arena de una de ellas. Ves, Javier. La playa es fundamental en nuestra vida.

Y luego están las puestas de sol sobre el Cabo de Roche y las carreras de caballos de Sanlúcar y las barbacoas del Carranza y la pesca de mi yerno y sus amigos en las noches roteñas... En fin. Un verano sin playa es como unas vacaciones sin sentido. Sobre todo si conseguimos hacer en ella algo más que tostarnos vuelta y vuelta. La cuestión, como casi siempre, es encontrar en ella, querido amigo Fernández Martos, ese tesoro cuyo plano no nos llegará sobre las olas dentro de una botella. O quizá sí, nunca se sabe!

miércoles, 12 de agosto de 2015

El tabú de la muerte

Varias decenas de 'me gusta' no me liberan de la atención a los pocos casos en los que alguien me ha afeado la publicación de las fotos ya difunto del Hermano Adrián del Cerro. Pero quizá se les pase que fueron muchas las del recién desaparecido religioso hospitalario que he publicado también en estampas preciosas en las que repartía su bonhomía. 

O quizá tampoco se esté contemplando que estamos hablando de un verdadero santo cuya entrega se ha agradecido también mientras se le apreciaba en esa imagen ofrecida en el féretro expuesto en la capilla ardiente instalada en el Santuario San Juan Grande. El caso es que lo único importante es el perfil humano y religioso que, con las palabras o las fotografías, hemos exaltado.

Y, con todo, no he querido desaprovechar, una vez han pasado ya unos días de esa despedida a quien durante más de cincuenta años se entregó en Jerez por los más desfavorecidos, para subrayar una prestación más que este menudo servidor de Dios tiene para nosotros. Sin ir más lejos, Juan de Dios y Juan Grande, los dos grandes santos que la Orden Hospitalaria tiene en los altares, abrazaron directamente a la muerte en mil ocasiones en las que la atención a los necesitados alcanzó esa bendita desmesura.

Cuando a alguno le tiembla de ese modo la sensibilidad ante la imagen plácida de un bendito del Señor recién muerto tras vaciarse por los demás quizá nos toque revisar nuestro nivel de compromiso con las personas y con el mundo. Y si nuestros informativos se llenan a diario de los fallecidos en las guerras o nos zampamos otras muchas estampas de la crudeza que el género humano sufre... cuál es la razón de ese sufrimiento que alguno siente al ver al Hermano Adrián recostado para el viaje último?

Por cierto, a los que tienen el detalle no tanto de afear la publicación per se sino de considerar que no era necesaria la aparición de las fotos, les propongo el reto de hacer la lista de entradas, frases y consideraciones tan innecesarias o más que esas imágenes que encontramos a diario en Facebook, Twitter y otros lugares. Si hemos superado los tabús del sexo, del mal uso del lenguaje o de la agresión a los demás con infamias y demás zarandajas... qué nos pasa, llegados ya al siglo XXI, con el tabú de la muerte?

Hermano Adrián, ahora que estás cerca del Dios al que serviste en vida a través de tu entrega a los enfermos y pobres, ruégale por todos nosotros, por nuestras muchas debilidades y también por nuestras insufribles intolerancias!

viernes, 7 de agosto de 2015

Gente con duende

Se llama Carmen Martín Natera. No recuerdo el tiempo que hace que es amiga mía por Facebook, red social a través de la cuál hemos hablado alguna vez de lo que ella llama 'el duende'. Y yo, que siempre me he considerado el payo más desaborido que haya nacido jamás en el Barrio de Santiago, me apunté pronto a querer saber de ese pellizco del alma que siempre intuyo al usarse esa expresión tan flamenca. Pero éste es otro duende. Aunque no por ello disminuye mi interés por conocerlo, más bien al contrario.

Llaman así a ese 'amigo especial' que genera el inesperado temblor característico de quienes han de convivir con el parkinson. Y quien me explicaba qué significa ser morada de esa enfermedad crónica y degenerativa del sistema nervioso es paciente cuya edad y talante sorprenden. Siempre pensé en otras etapas de la vida al imaginarlos. Y la redención por semejante apriorismo había de llegarme procurando saber algo más de esta realidad tan singularmente atractiva de conocer. 

Carmen preside a quienes en Jerez se unen para ser atendidos en su vida con 'el duende'. Son más de 450 en la ciudad y unos 2.500 los casos diagnosticados en la provincia. Entre ellos, los 400 menores de 40 años son conocidos como EPIT (enfermos de parkinson de inicio temprano). Fue ella misma la que el 15 de enero de 2014 abrió un perfil de Facebook que se convertiría en sólo unos días de abrumador volumen de contactos en la llave para la constitución de la asociación Parkinson Jerez el 22 de febrero de ese mismo año.

Ella misma me habla de esa enfermedad de la que fue diagnosticada en 2013
como un ser que la habita, con el que puede hablar o incluso reñirle por una aparición inesperada. Y humaniza de tal modo su relación con aquello que la hace pensionista tan joven que sorprende comprobar aquello de lo que, quienes no sufrimos nada similar, nos quejamos con tanta facilidad. No todos los de la foto lo tienen. Pero sí conforman una junta directiva que encabeza la realidad de esa gente con duende que sale adelante con más vitalidad que yo mismo.

jueves, 6 de agosto de 2015

Cuando la Nochevieja te cambia los deseos

Foto de www.lavozdelsur.es
Se llama Rocío Vázquez Márquez y ha sido la primera persona en pedirme amistad en la conocida red social de la que ayer decía que la acción depurativa del verano promovía que alrededor de 300 personas fueran desagregadas de mi perfil. Y llega, de modo tan distinto a quienes son descartados por no aportar nada, con una historia que ni empezó ni terminó aquella Nochevieja en la que perdió el ojo por culpa de un cohete.

Su paso desde 2007 hacia el año nuevo vino marcado por la explosión en Los Albarizones, que es donde viven sus padres, de aquel desgraciado elemento con el que mal celebrar la llegada de 2008. Uvas, cava y jolgorio fueron sepultados bruscamente por un hecho que aún conmociona siete años y medio después. Y mi capacidad de empatía busca en piel ajena las sensaciones de un acontecimiento brutal para la vida de cualquiera.

Qué sea lo que se sienta en el momento en el que un cohete te deja sin el globo ocular forma parte de aquello que sólo se puede preguntar mostrando mucho más que el morbo del curiosón. "Quema pero no duele", me dice Rocío sin que parezca cruento el recuerdo. Pero no me fío de mis sensaciones. Menos aún a través del lenguaje escrito que, como se ve, es mucho menos trivial de lo que tantas veces se pueda sospechar de una conversación por Facebook.

Esta chica, joven e imparable ante lo que la vida le deparó entonces y que tantas otras repercusiones posteriores le trajo (eso sí que es cruento), conoce bien, y así lo explica, esos mecanismos del cerebro por los que, cruzado el umbral de lo lógico del aguante humano, bloquea las posibilidades del dolor. El físico. No sé si también el del corazón. Pero ella es fuerte. Sólo siéndolo puede sobrellevarse tanta operación.

Espera confirmación para una nueva intervención quirúrgica que hará ya la número 15 de todo ese largo itinerario para recuperar parte de lo perdido entonces. Y espera, cansada pero decidida, que un trabajo le ayude a salir adelante. También espera cosas que otros seguramente tenemos aunque para ella son un objetivo aún por alcanzar en el recuerdo de una de esas noches en las que los deseos se ahogaron en una copa de cava no consumida.

Otros nuevos vinieron a sustituir a aquellos para los que todos podemos atinar poniendo ejemplos. Trabajo, felicidad, salud para los demás porque ella la tenía antes de aquel cohete que la impulsó cinco metros hacia atrás en aquella Nochevieja y cinco mil hacia un ostracismo por el que, cuando ahora se habla con ella, pareciera que jamás hubiera pasado. Enhorabuena por tu admirable fortaleza. Y suerte en la próxima intervención!

miércoles, 5 de agosto de 2015

El hastío del estío

Me he topado de pronto con esta obra de José Cabello Ruiz. Y me he parado en ella sin saber bien porqué. Eso sí, me he detenido queriendo identificar algo que por un momento me ha costado dilucidar. Tan desocupado como reflexivo en estas vacaciones, la canícula llegó con vitola de puesta a punto personal este año. Y ello impone estar atento a los signos propuestos de modo inesperado. Es el caso. Y la cosa es jugar con las palabras como quien lo hace con el montón de las piezas de un puzzle. Hasta que encuentras que una junto a otra cobran sentido.

Es cierto que son las tres de la tarde. Y que en la calle hay 37º. En los albores del sesteo, no puede esperarse mucho más de mí. Y no deja de ser paradógico en quien, como yo, apenas conoce esa cabezada post almuerzo a lo largo de todo el año. Pero reconozco que si ello, el reencuentro con el sopor veraniego, ayuda a un ejercicio que es inconsciente en mi mente... no lo es menos que habrá ahora quien me diga, conociéndome, que me baje de esta melancolía que es para mí tan confortable tren al que subir en momentos... especiales.

También es cierto que soy andaluz. Y que más me valdría dejarme invadir por la luz mediterránea que tan bien convirtió los pinceles de Sorolla en aldabillas que abrieran las ventanas estivales de par en par. Y que tendría que arroparme, por demás, del rumor de voces en la orilla de esas chicas vestidas del blanco que el valenciano llevó al lienzo. Juguetonas como las olas del mar en nuestras playas de la provincia, la algarabía, el tinto de verano y el éxito musical de turno sonando desde la sombrilla vecina habrían de definir mejor mi tiempo de vacaciones. 

Pues resulta que debe haber en mí un alma castellana, un etéreo pálpito que me coloca con más facilidad en la infinitud de un trigal a punto de ser recogido bajo el sol de justicia de agosto en el interior, ése ubicado a centenares de kilómetros de la playa más próxima. Seré 'gili'? Teniendo a la mano las calas de Roche y Conil o los arenales dorados de la Bahía y la costa noroeste... Pues tengo un chip que, aún estando en ellas... en nuestras playas, me coloca el celofán de un cierto hastío que, para mí, también es consustancial al estío.

Pero no sobrecogeros. No me miréis raro. Ni me llaméis cosas feas por ello. Dejad que el juntaletras se desahogue. Que siga buscando, aun en la soledad escogida o sobrevenida, las claves de un tiempo que es depurativo. Y lo es desde la más pura entelequia hasta lo más pragmático y directo. Acabo de cargarme (perdón, desagregar) a casi trescientos amigos de mi perfil de Facebook. Un ejemplo de aquello que la mirada a mi infinito 'trigal' emocional conduce. Los elegidos ni lo notarán. Seguro. Los demás seguís conmigo. Verdad?

sábado, 1 de agosto de 2015

Corredor de fondo también en agosto

Escucho a Pink Floyd y miro mi portada de Facebook. Eso son las vacaciones. Serenidad de espíritu y moverme sólo a mi gusto. Las carreras que me pida el cuerpo. Ni una más. Menos aún de ésas que me hacen velocista entre rueda de prensa y rueda de prensa a lo largo del año. Así comienzo hoy agosto, mes que se inicia teniéndome ya con un rodaje de una semana sin aparecer por el tajo. Con soledades escogidas y reflexión interior sobre esto, aquello y lo de más allá... Así pasan las horas. Y, eso sí, con el claro propósito de no perder ni una cosa ni la otra mientras tanto.

Abandonar la serenidad es cada vez menos probable en mi caso. Mal que me pese el recuerdo de apasionamientos explosivos protagonizados ha no mucho. De hecho un cruce de opiniones en una de las redes sociales pudo dar para ello hace un rato. Bastó, sin embargo, la moderada exposición de mi pensamiento, la reconducción del debate al plano en el que se generaba y comprobar que el ruido de sables tampoco iba camino de afrenta alguna. Por eso me alegro de la mesura convertida en botín de esa lucha de la vida que siempre procuré incruenta y no siempre se me concedió.

Y al respecto de la acción, del movimiento, del ejercicio, del dinamismo incluso en la reflexión... en esa parada y fonda en la posada del urgente aliento estival... conviene aclarar que nunca fue, durante el año, una huída hacia adelante sino la marcha hacia el futuro. Desconocido, quizá. Pero a paso firme pese a la incertidumbre. Y, con todo, aunque ahora en verano aún me sobresaltan, a través de mi android, correos, teletipos y mensajes de todo tipo sobre la actualidad... sólo me pongo en marcha para cosas como esa imagen de la foto. Y que poco se parece a mis carreras por el centro de Jerez a lo largo del año.

Sigo en ellas, en las movidas lúdicas, mientras quiero que me dejes decirte una cosa que, al llegar al final de esta entrada, me parece imprescindible. Posiblemente no hayas entendido mucho de todo lo expuesto y tendrás que releer para procurar percibir algo de lo dicho... de cómo y porqué hoy me ha dado por ahí... Pero no te preocupes, no es por tu culpa. Soy yo que pongo también, alguna vez, las neuronas a descansar. Pero debes saber que es mucho más que una mera descongestión estival de esos otros temas que, incluso en esa estación, poblan mi pensamiento 'blogerizable'.

viernes, 31 de julio de 2015

Pemán dixit

Cuando dijo que "un hijo es una pregunta que le hacemos al destino" seguramente José María Pemán y Pemartín (Cádiz, 8 de mayo de 1897 - Cádiz, 19 de julio de 1981; tan laureado como dramaturgo y poeta) pensaba en ese rictus que provoca la responsabilidad de una paternidad que busca altura de miras. No me sugiere esa frase el autoritarismo relacionable a su pensamiento político y que, sin embargo, tan común sería entonces en las relaciones paternofiliales. 

No se me ha ocurrido otra cosa, una vez ha aprobado el Ayuntamiento de Jerez en pleno la retirada de su busto del Teatro Villamarta, que leer escritos de este hombre tan marcado por el régimen franquista y su acendrada vida de fe. "La guerra, con su luz de fusilería, nos ha abierto los ojos a todos: la idea de turno o juego político ha sido sustituida para siempre por la idea de exterminio o expulsión", dijo. Y ésta sí que me deja con una gran incertidumbre. A la vista está que regresó la soberanía popular y la democracia. A Dios gracias.

Pero ello no obsta para seguir buscando. Dejarlo hablar a través de su obra. Y es entonces cuando encuentro una respuesta suya a Millán-Astray. El fundador de la Legión soltó lo siguiente: "Muera la inteligencia! Viva la muerte!". Y aquella memez maltraída por hombre tan próximo al Generalísimo recibió la salida al paso del hombre de la cultura que fue Pemán: "No! Viva la inteligencia! Mueran los malos intelectuales!" Al primero no tanto pero al segundo sí que me permito atribuirle carácter figurado a su referencia a la muerte. 

También le asigno sin reparos una actitud de defensa del pensamiento, de la intelectualidad, de la cultura, de las letras... No se dedica a la creación artística quien no aboga por ese respeto para los demás que quien escribe necesita para crear. 'Poema de la bestia y el ángel', poemarios como 'A la rueda, rueda' y 'El barrio de Santa Cruz', conferencias como 'La traición de los intelectuales', novelas como 'De Madrid a Oviedo pasando por las Azores', teatro como 'El divino impaciente', 'El romance de los muertos en el campo'... 

Cuáles de estas obras conoces? Leerlas es saber fehacientemente de quién hablamos. Todo lo que sea hablar de oídas, valorar sin haber analizado o levantar el brazo en un pleno porque es lo que toca no deja de ser pobre. Quizá sea bueno saber, además, que cada cuál somos hijo de nuestro tiempo y que, quizá, nos toque en un futuro defender nuestras posturas públicas de la crítica acerada de quienes, alejados del contexto, sean tanto o más críticos con nosotros que nosotros con Pemán o con el lucero del alba.

jueves, 30 de julio de 2015

La cruz del pleno

"Quién puede verte muerto? Tú no estás muerto porque aún molestas a muchos vivos!" La frase es de José Joaquín Gómez González y fue pronunciada en el sevillano Teatro Lope de Vega al final de su Pregón de la Semana Santa de 1982. Eso ha ocurrido esta mañana en el salón de plenos del Ayuntamiento de Jerez. Que el crucifijo ha molestado. Y eso desvela cuánto importa la cruz porque, en efecto, sólo lo vivo... sólo lo que mantiene vigente y activo su mejor influjo... puede ser antepuesto a la toma de decisiones que urgen a la ciudad.

El concejal de Izquierda Unida Raúl Ruiz-Berdejo ha reconocido esta mañana, en la sesión ordinaria, que le molestaba ese signo cristiano en un lugar en el que, sin embargo, se sigue reconociendo la capilla del antiguo y desaparecido Hospital de la Caridad. Y pidió a la alcaldesa, la socialista Mamen Sánchez sentada donde alguna vez hubo un cura celebrando la Eucaristía, que el elemento en cuestión fuera retirado. Así ocurrió. Luego seguiría el pleno con los puntos previstos en su orden del día, de mayor interés para los ciudadanos sin lugar a dudas. 

No recuerdo que a ningún concejal le hubiera dado, en los últimos años al menos, por tener un gesto de respeto para con Cristo en ese objeto que, por ello, no era tenido en cuenta en el salón de plenos como objeto de culto. Mero adorno pues. Ninguna decisión se tomaba allí por tanto en su nombre. Pero aún así molestaba. Ahora es cuando uno se pregunta si es preciso revisar a los concejales cuando accedan al salón por si uno lleva un crucifijo al pecho o una estampa en la cartera o las cruces de las banderas y escudos que la tienen o...

Estoy convencido que una encuesta entre los votantes del señor Ruiz-Berdejo darían un gran apoyo a esa petición realizada esta mañana. Del mismo modo creo, con porcentaje menor me aventuro de decir, que los electores de la señora Sánchez quizá avalaran la retirada del crucifijo. A quién votan, sin embargo, todos aquellos que llevan toda la mañana haciéndome llegar su queja por las más diversas vías? No me voy a animar a responderlo porque me equivocaría pero puedo certificar que existir existen. Y con el mismo valor para su voto.

Pero no creo que hubiera nadie en el salón de plenos dispuesto a elevar su voz en contra de lo ocurrido. Quizá tampoco haga falta. Mejor entender que ni Cristo elevaba su brazo desde el crucifijo retirado a la hora de votar proposiciones, por ello quizá no era imprescindible el gesto de esta mañana (salvo que se quisiera hacer daño a la gente de fe), ni quizá haya nadie entre los veintisiete ediles que adopten posiciones en su nombre ante cualquier iniciativa. Pero ello no quita para que todos, propios y extraños, sepan que todo tiene un precio. 

miércoles, 29 de julio de 2015

Al cante, al baile, al toque y a las palmas... Ojeda!

Camino de los Viernes Flamencos estamos. La semana que viene se iniciarán en el Alcázar. Y en Cádiz alcanzarán ya mañana el segundo Jueves Flamencos. Para las Noches de Bajo Guía aún tendrán que esperan propios y extraños, sanluqueños y visitantes, al último tercio de agosto. El misterio por el cuál es el estío el marco de estos acontecimientos deja de serlo en cuanto se disfrutan. Las templadas noches de este tiempo, el sosiego recobrado y qué sé yo qué más hacen del verano el momento. 

Cabe poca discusión. Ni tampoco es necesaria. Los análisis no salen de esas vísceras que a veces uno ha de poner en liza para sentir las cosas que son de verdad. Como el flamenco. Como tampoco cabe explicación para ese arte casi telúrico, bramado desde las entrañas por voces tan privilegiadas como aquellas que nutren los carteles de éste como de cualquier otro festival de "medio formato" como le escucho decir a mi amigo David Montes.

Pero voy a otras artes. Y me parece que es de mérito quien se dedica a la gestión cultural y de contratación artística aplicada a este tipo de propuestas. En el cartel de los Viernes Flamencos (si son cuatro no entiendo el singular que expresa el cartel). Hay que irse abajo para encontrar, pequeñito, Arte Sherry. El logo de la empresa de Antonio Ojeda no es novedoso en estos carteles. Lleva algunos años ahí. Y eso es algo que se entiende a poco que se le ve trabajar.

Existe una novedad con todo. Este año hubo convocatoria pública para su organización a fin que existiera opción legítima de otros para desplegar su savoir faire. Y aquello que ya dejó planteado el gobierno popular anterior y con lo que se encontró el actual socialista concluye con el mismo resultado. Pero no porque no faltaran intentos sino porque a la hora de la verdad no hay más garantías en otros sitios, en otras personas, en otros paladares con el artista.

Tengo entendido que no han faltado siquiera algunas UTE (esas uniones temporales de empresas que yo pensé sólo se utilizaban para la construcción) con las que torcer la inercia de seguir teniendo en esas pomadas al que al final, con concurso o sin él, se lleva el gato al agua. Algo tendrá el agua cuando la bendicen. Algo tendrá Ojeda cuando ahí sigue, poniendo a disposición su gran profesionalidad y su reconocida dedicación.

Aseguro solemnemente que abomino de esas comparecencias en la sala de prensa del Ayuntamiento de Jerez en las que pretenden sentar hasta 'el tato' para luego mover y remover micros, a medida que intervienen, hasta que terminan haciendo un nudo con los cables. Pero el día que fueron presentados los Viernes Flamencos sí que eché en falta algo más de contenido en una rueda de prensa en la que debió haberse sentado a Antonio para que nos fuera mejor explicado.

lunes, 27 de julio de 2015

Mil gracias

En diciembre de 2008 inicié una relación que, con irregular intensidad, me ha venido ofreciendo muchas satisfacciones. No le han faltado parones que han provocado, alguna vez, la desazón de quien no terminaba de entender las propias parálisis. Siempre las justifiqué en la angostura que mi tiempo, en la falta de motivación o en una necesidad de guarecer mis sentimientos. Pero, a decir verdad, públicamente siempre alegaba lo primero. Era recurrente y creíble, pero en mi fuero interno quedaban las ocasiones en que las razones eran otras.

Ésa es la causa por la que es ahora cuando, siete años y medio después, llego al millar de artículos en este blog que sabe de mi espíritu y de mis tripas, de mi alturas de miras y de mis miserias, de lo que sé y de lo que no, de mi pensamiento sobre la actualidad o mis personales contingencias y vicisitudes... Escribir es la cuestión. Escribir porque sí. A veces porque algo ocurrido me empujaba a no quedarme callado. Otras porque el valor terapéutico de poner negro sobre blanco se me ha demostrado preciado tesoro a mi alcance.

Agradezco ahora, que no es precisamente de las etapas menos activas en 'Palabra de Gaby', tanto seguimiento inesperado en los albores del blog. Reconozco que escribir para mí, para expresar aquello que necesitaba fuera leído o no, no obsta mi entrega hacia cuantos me habéis seguido alguna vez. Aventuro otros miles más porque hace tiempo que descubrí que en ello me va la vida, y la vida se va inmisericorde. Dejar de escribir es como dejar de vivir... por dejar de expresar... por dejar de sentir... Prometo no consentirlo!

domingo, 26 de julio de 2015

Café canalla en el Alcázar

No era hora de sentir la acidez, el aroma y el cuerpo del jugo de sus granos, por muy escogidos que estuvieran por el propio Juan Valdés. Era más bien hora del gintonic. Pero también es verdad que, si alguna vez creí que ayer acudía al Alcázar a disfrutar de una dulce noche de boleros, pronto sentí identificación en el punto canalla de Manolo Quijano. Y ello transformó la 'cafeína' presupuesta en el nombre de los susodichos en el punto amargo de la mejor de las ginebras.

El Alcázar jerezano se llenó hasta la bandera de señoras seducidas por el trío leonés, que les cantaba y contaba las vicisitudes del amor como el que charla con amigos y les confiesa, sin alardes, sus alegrías y sus penas. Pero a mí, además, me llevaron hasta la mismísima taberna del Buda, con Lola, Raquel y sus llaves, aquella otra que se fue a Brasil... Al mundo canalla que encarnan tan creíblemente y que, aún desde la elegancia externa e interna, es otro aval.

Viraron hace unos años, tras siete desaparecidos del panorama musical, hacia esos orígenes que les hizo niños descubridores de Armando Manzanero. Y ello sumado a su exquisitez como músicos, heredada ésta de su padre, les confiere un atinado perfume que reanima sorprendentemente la escena actual del bolero. Han encontrado ese nicho de mercado en el que saberse habitantes de por vida de un sitio menos voluble que el de un mero grupo más.

Trompeta con sordina soplada con aire cubano y chelo y batería en manos ajenas adoban la gira de su último disco, 'Orígenes. El bolero. Volumen 3'. Y las guitarras, el ukelele y el contrabajo al alcance de Manolo, Oscar y Raúl evidencian que estamos ante músicos de verdad, de escuela y esfuerzo. Todo lo completan las voces, especialmente la de su líder. Y el ocurrente primogénito sabe tirar del carro dando el sitio más digno a los hermanos.

Café Quijano regaló anoche a Jerez dos horas y media de un concierto memorable. Sabía que iba a disfrutar al fresco de la noche del alcazareño Patio de San Fernando. Lo que quizá no sabía es que conseguiría verme sumido en un mundo cuajado de esos caballerosos y sutiles acentos masculinos contados expresa y convenientemente a tanta señora madura dispuesta a creer todo aquello que la delicada y grave voz de Manolo tenía que contarles.

Y los hombres aprendimos a ser mejores transmisores de unos sentimientos que nos son comunes a ellas. Si una de las claves está en esa sublimación del puntito canalla que presumo comprenderemos en estos leoneses la posesión de una estrella que alumbra su senda de éxitos. Con todo, habrá que convenir que, además, son músicos de una pieza. Un gustazo para todos. Una delicia brindada por 'Las Noches de Verano'. Un buen comienzo de mis vacaciones.

sábado, 25 de julio de 2015

Diario de una urgencia

Siete días sin hacer estación en las páginas de este rincón en el que ser yo mismo me empujan al feliz desahogo. Pero, sobre todo, lo hacen las condiciones en las que he vivido las últimas horas de mi existencia laboral. Por eso hoy es sábado de inevitable desasosiego. Es ese extraño bienestar molesto que suele ser inquilino transeúnte de cuerpo tan desacostumbrado al descanso. Así es como, de ayer a hoy, me veo viajero desde el loco colofón de una larga mudanza de la radio hacia el vacío sabatino con el que inicio mis vacaciones.

La urgencia de lo que ya disfruto no es óbice para sentir, en el tránsito brutal desde el estreno digital en medio de cajas y operarios hasta el 'sin horas para levantarme' de hoy, un vértigo aparentemente lesivo para los intereses de mi serenidad. Pero es itinerario necesario para llegar a donde era preciso tras curso tan complicado. Tanto que en el disco duro quedan para siempre vaivenes personales, emociones y adrenalina junto a retos profesionales rozados o logrados con esas novedades que ahora fraguan.

Y el diario de las mil y una sensaciones vividas desvela, sin ocultaciones innecesarias, que todo ha merecido la pena. Y la gratificante expectación de los días que hoy comienzo son como esa cálida arena que acoge nuestros juegos sin que le sea extraña la confluencia sobre ella del vigor de unas olas que no cesan en su actividad. Pero son respetuosas con la quietud dorada del solar sembrado de sombrillas y el alma habitada por otras prescripciones que, desde un corazón nuevo, son regeneradoras eficaces.

Que sí, que hoy estoy comenzando mis vacaciones. Y hasta el 28 de agosto no volverán a saber de mí en Larga 9, nueva dirección que cuesta implantar entre los automatismos propios de la existencia cotidiana. Allí estrené ayer la AEQ Forum que me espera en estudios envidiables que siembran, pese al ansia por estas vacaciones, la extraña pena de no haber tenido más días para disfrutarlo antes del descanso. Pero la urgencia es cierta. Y tan bullicioso 14-15 agitó lo suficiente el envase como para que ahora toque quietud.

sábado, 18 de julio de 2015

Sábado benedictino

Fuga mundi. Ése es el sentido de mis sábados. No es posible soportar mis 'de lunes a viernes' si no consigo hacer el vacío en mi mente y hasta en mi actividad física al llegar el sexto día de la semana. Por ello no debe ser una casualidad que, por obra y gracia de un regalo de mi hermano Javier Fernández Martos, hoy lo esté disfrutando paladeando cada imagen, cada canto, cada frase del video 'Vigilantes de la noche'. Lo podéis ver en mi muro de Facebook. 

La noche oscura del alma existe. Y cobra formas que recrudecen mi reconocible capacidad de sufrimiento. Por ello, es día de hacerme 'tonsura' puntual. Otros van apareciendo en la pantalla con mayor pretensión que yo. Un hijo de la Revolución del 68, drogas y alcohol inclusive. Un chico procedente de familia convencidamente catolica. Un motero tan volube y veloz como puede llegar a ser la vida sobre las dos ruedas. Un joven lleno de incertidumbres con familia no necesariamente cercana a la fe. Son hoy monjes benedictinos. 

Votos definitivos, vida en el monasterio hasta la muerte. El monje escribe sus votos, los muestra uno a uno a todos y cada uno de los compañeros de comunidad en una sencilla pero impactante procesión ante ellos con el documento en la mano hasta llegar a la mesa del altar y colocarlo bajo la hostia consagrada en signo de compromiso inquebrantable. En ello están. Y así lo cuentan mientras el canto gregoriano acompaña tanta sugerente explicación de lo que ocurre tras los muros de Le Barroux.

"No hay nada comparable a lo que Dios nos da" dicen a la hora de salir al paso de la curiosidad por el rigor de las exigencias del ora et labora que dictara San Benito. Maitines, Lectio Divina, reflexión ante los textos de los Padres de la Iglesia, Prima, Tercia, Sexta, Nonas... se dan la mano, desde hace más de quince siglos en el monasterio francés, con la labor de panaderos, cocineros, herreros, agricultores, viñadores, campaneros, ebanisteros, sastres o bibliotecarios que también les toca. 

Bálsamo en la noche del alma que a veces toca cruzar resultan una cosa y también la otra. La serena penumbra del monasterio francés ayuda, y el entorno de esa zona cercana a Los Alpes también. Pero no es lo más importante. "Cada vocación es única, cada experiencia personal..." percibo en mi abandonado francés ahora desempolvado pese a la subtitulación de las imágenes. Todo en Le Barroux es fidelidad. Al magisterio, a la liturgia, a la regla y al espíritu de San Benito. Pero... "no sirven para nada, qué hacen?", dice alguno sobre ellos.

Hoy están haciendo mucho por mí. Y cuando no esté viendo el vídeo lo seguirán haciendo desde su oración. Termina el audiovisual y también esta entrada en mi blog. Comienza el informativo en la tele. "Grecia estrena ministros más pragmáticos!", escucho. "Los monjes hicieron Europa, pero no fue a propósito, fue una aventura interior", leí en 'Vigilantes de la noche'. Ahora me cuesta mirar a mi alrededor sin relacionarlo todo con lo vivido entre los muros del monasterio. 

Y sorprende comprobar que no resulta difícil, ni raro. Que los monjes no están tan lejos del mundo ni para nosotros ocurre allí nada que no nos sirviera para vivir mejor nuestra existencia. Otro beneficio más de este mi sábado benedictino.

jueves, 16 de julio de 2015

El Ayuntamiento de Jerez me contesta

Pretencioso verdad? Pues vale. Es cierto que mi 'En nombre de la sostenibilidad', publicado en este blog el pasado 12 de julio, no era sino el eco de una insistente y gratificante voz de la calle. Pero le puse altavoz y ahora me apetece pensar que la nota municipal, tres días después, llega en parte porque me puse al teclado. Ea! Que esto mío es algo más que letras 'gongorinas' (eso sí sería pretencioso), como por mis formas a veces no falta quien acusa con cachondeo. 
El caso es que el teniente de alcaldesa de Sostenibilidad, Participación y Movilidad, José Antonio Díaz (en la foto escuchando a vecinos quejosos), envía un mensaje de tranquilidad con respecto a la retirada de arboles del trazado que recorre el carril bici de la ciudad. "El proyecto contempla el traslado y plantación de los árboles existentes en el recorrido, así como la colocación de nuevas especies acordadas con la Delegación de Medio Ambiente", dice. 
"También se colocará riego automático en todo el trazado", aclara el delegado, que, acompañado de técnicos municipales y asociación de vecinos de San Ginés de la Jara, visitaba las obras que se efectúan en la Avenida León de Carranza. La ejecución en esta avenida, ahora llamada Ingeniero Ángel Mayo, implica la reforma de este vial y ello conlleva la retirada de su arbolado y cambiar su hilera de farolas.
Los fondos europeos obligan a que las obras en todo Jerez estén concluidas el 31 de diciembre de 2015. Hasta el día de hoy el proyecto está ejecutado en un 40% siendo el verano clave para acelerar todo lo posible la obra de los 25 kilómetros  que en total tendrán las vías ciclistas en la ciudad. Pero, cuidado con la arboleda. Los jerezanos, en una prueba de madurez medio ambiental capaz de superar el empeño de la administración, no se callan si se arrasa.
Pues a tomar nota: "El arbolado, tal como se ha informado en la Mesa de Movilidad, se ha trasladado a los vecinos y colectivos, y se salvará gracias a su traslado al vivero municipal de Santa Teresa. En su lugar, una vez esté habilitado el carril-bici y dentro de la reforma de la avenida, se colocarán los árboles trasladados y también se plantarán árboles de otras especies recomendadas por el área de Medio Ambiente". 
"Con ello, como se ha dicho, se conseguirá mantener el arbolado e incluso mejorarlo y aumentarlo con esas nuevas especies que se eligen conforme a la climatología de la zona. Así su mantenimiento es más fácil, menos costoso y además no ocasionarán molestias a los peatones. Esto ocurrirá en esta avenida y en todas las zonas del trazado que se vean en la misma situación, así no se perderá ningún árbol", señala José Antonio Díaz.
Bien. Adelante. Esperamos. Creemos. Ansiamos. Veremos. Pero me gusta que se salga al paso. Los que se pronuncian con decisión suelen ganarme. Aunque corran el riesgo de equivocarse y, seguramente, requieran luego corregir si se han precipitado. Pero nada de silencios poco comprometidos ante los embites que desde el blog o la propia calle surjan. Nada de balbuceos de los que terminan ofreciendo la talla real de nuestros gobernantes.
De unos y de otros, silencios y balbuceos, he visto este miércoles, por ejemplo, en los plenos de constitución del Gobierno jerezano y el urgente para pedir otros 38 años con cargo a los créditos ICO. Y eso sí que me ha desconsolado mientras cierto gritones elevaban, desde el público, la voz contra el único que, por empeño y convicción, estaba dando la talla en el salón de plenos. Pero de eso hablaré otro día. Hoy aplaudo la respuesta sobre la arboleda de las vías ciclistas.

martes, 14 de julio de 2015

Siéntate y pedalea!

Ganar batallas con tenacidad, aun tiempo después de haber quedado todo aparentemente decidido, debe ser un valor de la izquierda. Es la revisión como herramienta. Y eso no está mal... mal que pudiera pensarse que la ganancia, aplicada en tiempo de descuento y aun a riesgo de abrir debates que ralenticen los proyectos, pueda traer más quebraderos de cabeza que aportaciones imprescindibles a una cierta altura de la película.

Así, y cuando el proyecto de vías ciclistas se acerca a la mediación de su desarrollo, llega Izquierda Unida con planteamientos de recuperación de cuanto pudo perderse del detalle original en la negociación con el PP al frente entonces del Ayuntamiento de Jerez. Aseguran que estos cambios afectarían a una superficie mínima del conjunto total del trazado. Lo que no quita para que, concluido en muchos tramos y avanzado en otros tantos, parezca algo tarde para cambiar.

Hablan de sustituir el ramal de Ponce y Divina Pastora, la extensión del previsto en Porvenir por Corredera y un nuevo carril bici en Muro. La eliminación del primero se salvaría con una ciclo-calle de doble sentido en Porvera. La extensión del segundo eliminaría las proyectadas en Pedro Alonso y Caballeros. Y el carril-bici en Muro permitiría eliminar las ciclo-calles proyectadas en Merced y Muro, que podrían ser un peligro para la integridad de los ciclistas. 

Cómo lo veis? No es lo único, también se propone la recuperación del carril-bici en las calles Nube y Valderrama, eliminado del proyecto original y que integra al barrio de San Mateo en esa red. Ya decía en la última entrada del blog que estoy receptivo a la idea de incorporarme a los hábitos de transporte que se promueven con  este proyecto, aunque aún deban convencerme con una conectividad que permita mis traslados desde donde me conviene hasta donde me interesa.

Otra cosa es que se lleve a viales que, como la Porvera, ya tienen suficientes dificultades sin bicis de por medio. Otra distinta es que el colapsado gobierno municipal que mañana al fin quedará constituido por medio del correspondiente pleno esté para revisar este tipo de cosas con la que tiene encima en tantos otros terrenos. Y otra es que, aunque el equipo de Mamen Sánchez tenga ganas de ello o se vea obligado por el acuerdo de investidura, la Junta esté por la labor.

Y con todo, no lo den por descartado. Háganme caso. Cosas veredes, Sancho. Al fin y al cabo esto no está haciendo más que empezar, y el que no aprieta por la vía de los sueldos lo hace por la de los pedales. O por aquello que vaya tocando. En medio de ellos, los sufridos socialistas se disponen con empeño a subir el Tourmalet en el que, a lo que se ve, puede llegar a convertirse esta legislatura aún en sus albores. Que no nos dé una pájara a ninguno!

domingo, 12 de julio de 2015

En nombre de la sostenibilidad



Aún recuerdo a Pedro Pacheco sobre dos ruedas luciendo un cartel con la leyenda 'Carril bici ya'. Era uno de esos Día de la Bicicleta que, quizá a finales de los noventa, yo no terminaba de entender cómo llevaba al alcalde a hacer una reivindicación que, sin esperarse por entonces a la Junta en ese menester, habría de asumir el Ayuntamiento de Jerez.

Fue poco después que apareció, a modo de brochazo amarillo sobre el acerado de las zonas elegidas, aquello que queriendo parecer lo que convertía al regidor en arte y parte, más bien sonó a tomadura de pelo una vez se supo a cuánto se elevó semejante gasto en poco más que pintura. Luego fue el intento socialista de Pilar Sánchez con restos aún presentes en Cristina.

Ahora va por derecho desde que, en la anterior legislatura autonómica, la presencia de Izquierda Unida como necesario báculo para que los socialistas pudieran quitar de en medio a los más votados populares, trajo desde la Junta la propuesta actual. Y las obras que tienen patas arriba calles, avenidas y plazas de la ciudad marchan a buen ritmo.

Pero a la vista está que el empeño de ponernos a todos a dar pedales, cosa que si la conectividad pretendida propone itinerarios lógicos prometo plantearme, no puede saldarse, en Jerez al menos, sin algún esperpento venga el proyecto de donde venga. O no lo es querer promover un transporte más sostenible a base de arrasar en más de un sitio con la arboleda del lugar?

Jacarandas en la Zona Sur y otras especies en otros lugares no sobreviven para dar sombra a las vías ciclistas, que se encaminan pronto a tener la mitad del trabajo hecho. Se dice que se retiran, van al vivero y serán sustituidos. Antes de final de año habremos podido comprobarlo. Más vale que sea así en todos los casos porque difícilmente se complementan.

En nombre de la sostenibilidad parece lógico que nos seduzcan desde las instancias que sean necesarias para dejar el coche en casa. En mi caso la moto. Pero ese digno estandarte de la calidad de vida ansiada pierde su sustento más elemental ante los ciudadanos si se llevara a efecto con un coste medio ambiental como el sospechado. 

Las prisas pueden ser necesarias para aprovechar los fondos europeos utilizados. Pero son absolutamente desaconsejables si, por contra, nos hacen depredadores de la naturaleza más cercana, aquella que nos indica a los urbanitas los valores que hemos se seguir cultivando. Y la arboleda de nuestras calles merecen nuestro respeto. Sólo lo pregunto: se está teniendo?