martes, 30 de junio de 2009

Ministerio del Acolitado para Pablo Gómez


El pasado domingo recibió el ministerio del Acolitado el seminarista jerezano Pablo Gómez Mateos. La ceremonia, oficiada por monseñor José Mazuelos Pérez, tuvo lugar en la iglesia de la Compañía de María, sede circunstancial del Seminario Diocesano.
Junto al obispo de Asidonia-Jerez, que le administraba su nueva condición y dedicó palabras de aliento en su nueva responsabilidad, acompañaron al ya acólito el rector, Ignacio Gaztelu Pastor, además de otro sacerdotes diocesanos, sus compañeros en el Seminario y numerosos fieles que llenaron el templo.
Pablo es uno de esos tipos que con su sóla sonrisa alienta un mundo mejor. Siempre me dio la impresión de tratarse de una persona tan espléndidamente dotado de la vocación que se requiere para asumir la que se le viene encima que nos aguarda un espléndido sacerdote.
La Delegación Diocesana de MCS tiene en él a un seguidor de nuestro trabajo cotidiano. Sus palabras de ánimo, sus envíos de fotos y su inquebrantable apoyo no tienen precio. Vaya mi oración por su perseverancia en un empeño del que otros debemos aprender.

lunes, 29 de junio de 2009

El Puerto ya tiene Virgen del Rocío


Monseñor José Mazuelos Pérez, obispo de Asidonia-Jerez, ofició ayer la solemne pontifical de acción de gracias que pusol colofón a todo un año de actos conmemorativos (litúrgicos, caritativos y socio-culturales) con motivo del Cincuentenario de la Refundación de la Muy Antigua y Real Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de El Gran Puerto de Santa María.
Un altar extraordinario instalado en plena Plaza de Alfonso X El Sabio de esta localidad de la Diócesis, junto al Castillo de San Marcos, se convirtió en presbiterio organizado entre una gran cruz y la imagen de la Virgen del Rocío bendecida durante la celebración y que ocupaba el paso de Nuestra Señora de las Mercedes, patrona de la sevillana Mairena del Aljarafe.
El pastor diocesano contó en la concelebración, ante el simpecado de la Hermandad del Rocío portuense y los guiones de las restantes rocieras de la provincia y los de las de penitencia y gloria de la localidad, con los sacerdotes Antonio Durán, Luis López-Cuervo, Martín Alexis González Gaspar, Alfonso Gutiérrez, José María de Quevedo y Ángel Pérez del Yelmo.
Ante una multitudinaria asamblea de fieles que atestaban la mencionaba plaza, Monseñor Mazuelos recordó a la importancia de la devoción popular a María Santísima así como que, más allá de la fiesta en que se convierten las manifestaciones rocieras, es preciso continuar haciendo presente la verdadera expresión de la fe de Cristo en brazos de la Virgen.
La imagen bendita, fruto de la donación de muchos devotos, fue, tras la celebración de la Eucaristía, el centro de atención de los fieles, que la acompañaron en la procesión de traslado a San Joaquín, parroquia de El Puerto de Santa María en la que tiene sede la Hermandad y donde quedará expuesta a veneración pública.
(Nota de prensa de la Delegación Diocesana de MCS)

domingo, 28 de junio de 2009

El verano de las hermandades


Me cansan, y mucho de un tiempo a esta parte, las sesudas reflexiones de realidades como las cofrades sobre las que cada vez, me lo está pareciendo a mí, menos posible es actuar. Y esto que ahora formulo es la expresión de un estado de ánimo, no uno de esos profundisísimos pensamientos con los que, a veces, hemos querido pasar por catedráticos de la cosa cofradiera.
Toca, sin embargo, abordar uno de éstos, pese a que el calor de final de junio me tiene con pocas ganas de buceos que no sean los propios de la playa o la piscina. En ello consiste, con todo, aquello que me propongo: en abundar, con seriedad, en el tono de un tiempo estival que, en las cofradías, va, con demasiadas alegrías, desde el cerrojazo impenitente hasta la determinación de decisiones importantes para el futuro.
Esta misma mañana queda atrás, en la feligresía de Santa Ana y cuando quizá usted aún lee esto, la última de las convocatorias del ciclo sacramental jerezano. Y algo parecido ocurre con los cabildos ordinarios de cierre del curso. Pero cuando todo indica, porque el tono cofrade de la ciudad parece no dar para mucho más, que tocará el lapsus encubridor de la actividad justita de algunas de nuestras corporaciones llegan las grandes e inesperadas decisiones de algunas de ellas.
Así, y cuando uno se convence de que el verano está para las Noches Candelarias o los Veranos Nazarenos, y muy poco más, lo cierto es que aún ocurren cosas de tanto calado como la decisión, la noche de este viernes, de un cambio de túnica. Sí, como lo leen. Ocurre que cuando uno apenas espera la respuesta digna de mención por parte del respetable acudiendo a esos ciclos fresquitos y veraniegos llega el Cristo y zarandea este tiempo que no había de dar más que para parsimonias.
Qué paradoja, además, una opción por el terciopelo cuando las temperaturas de este momento habían de ser mejor aliviadas con el raso. El Viernes Santo tendrá otro antifaz negro de ese tejido. Y hasta la sarga, que así serán ahora túnicas y capas en San Telmo, parece menos apetecible que ese satinado apetecible, al menos ahora con la calor. Así fue en el cabildo extraordinario del viernes. Así en una reunión que dicen llena de costaleros y cargadores. ¿Dónde los miembros de ese cortejo tan nutrido?
En fín. Una decisión grande. Y el Consuelo con el plazo de candidatos a su junta de gobierno desde el miércoles y la Exaltación con la Virgen recorriendo la feligresía de Las Viñas y el Prendimiento abriendo un centenario como cofradía pontificia y el pleno de hermanos mayores del estado de cuentas y... Cosas importantes para un verano que, aunque a veces cunda el desánimo, apunta que esto sigue vivo. Me alegro.

(La Voz, 28-06-09)

sábado, 27 de junio de 2009

Acción de gracias rociera


Monseñor José Mazuelos Pérez, obispo de Asidonia-Jerez, oficiará la celebración de la Eucaristía de acción de gracias con la que la Muy Antigua y Real Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de El Puerto de Santa María culminará los actos conmemorativos de su cincuentenario fundacional que ha venido desarrollando.
Tendrá lugar mañana domingo 28 de junio, a las 10,00 horas, en la plaza de Alfonso X El Sabio, de El Puerto de Santa María, y acogerá la bendición de una imagen de Nuestra Señora del Rocío donada a la Hermandad. Recién finalizada la Eucaristía, será trasladada a la parroquia de San Joaquín, sede de esta corporación rociera.
(Nota de la Delegación Diocesana de MCS)

viernes, 26 de junio de 2009

El encanto de Rota


El cielo con el más limpio azul que he visto desde hace mucho tiempo era todo un aliciente cuando esta tarde entraba por la calle Calvario. La brisa aliviaba esas horas de mayor calor que, hoy mismo, pude vivir en Rota. Y El Chorrillo y El Rompidillo y el muelle y el faro y el Castillo de Luna y la parroquia de la O y La Costilla... Me he reencontrado con la Villa y, ciertamente, ha parecido que hiciera una eternidad que no acudiera a la cuna de La Mayetería, al paraíso de las hortalizas y el arranque, del tintilla y la urta. Un paseo por sus calles me ha reconciliado con la vida que uno pierde a chorros cuando, a lo largo del año, la hiperactividad laboral me tiene creído de que eso es lo normal. Veinte días tengo por delante para demostrarme lo contrario. Días de vino y rosas quiero pensar que me aguardan. Al dulce encanto de Rota, por momentos cosmopolitamente turística pero esencialmente sencilla desde la propia personalidad de sus gentes, me entrego ya. Quizá les vaya contando. O quizá no. Tal vez no desee encontrar, al final de mis vacaciones, el trauma que me devuelva a las trazas de la vida que, puntualmente, abandono ahora. O, seguramente, quiera gozar íntima y familiarmente de esa tierra que se encomienda a la Virgen del Rosario. Algo se me escapará. No se preocupen.

jueves, 25 de junio de 2009

Con la cara partida


Uno de los atractivos iniciales de las vacaciones consiste en el sillón-ball. Es una tentación peligrosa porque luego uno tiene la sensación desagradable de haber perdido el tiempo. Pero es tanto el stress acumulado que no hay quien se resista. Al menos recién tomadas. A esa sensación uno la de esos acontecimientos deportivos que cada junio, que es cuando suelen convocarse, entretienen tan especialmente durante esos momentos anclados al sofá. Y la tele se reservaba para estos días que acaban de quedar atrás una cosa rara que llaman Copa de Confederaciones. Aún recuerdo cómo hablaban en Tele 5 sobre la Selección Española de Fútbol como la mejor del mundo. Alguien ha sugerido que, tras la Eurocopa ganada, no se nos escapará el Mundial de Sudáfrica y, en el mismo lugar y un año antes, ya hacíamos las cuentas que nos llevarían a comenzar a ser temidos de cara al Campeonato del Mundo. Y acabaron con Italia, en esa victoria sorprendente de Estados Unidos sobre la otra aspirante a pasar a semifinales, Egipto. Y ya esperábamos el tú a tú que estábamos convencidos que mantendríamos frente a la Brasil de Kaká. ¡Ay, cuento de la lechera! Ea, pues a hacer las maletas, que llegaron los Bradley, Howard o el 'xerecista' Altidore y nos hicieron (anoche) un roto (0-2) en los egos tan cuajados de suficiencias futboleras de un tiempo a esta parte. No hay, en cualquier caso, un mal que por bien no venga: la vuelta de los fracasos de la Selección, tan habituales antes de esta racha de treinta y tantos partidos ganados, han agotado, en el hastío de aficionado que se creyó la milonga de 'La Roja' mi tentación al sillón-ball. ¡Qué suerte!

miércoles, 24 de junio de 2009

Y también las notas


También son vacaciones aquellas que más allá de la piscina recién reencontrada, a sus puertas, nos colocan ante la tesitura de analizar esos balances del curso de nuestros hijos que constituyen los mencionados documentos académicos. Las notas suelen tener para nosotros, los padres, un mucho de reencuentro con el momento difícil de los propios éxitos y fracasos y un más, desde luego, de tensión de resolución incierta porque, a qué negarlo, la mencionada cartulina pregonará, de algún modo, con qué verano nos encontraremos. En función de las esperadas calificaciones, los planes salen o no salen. Así son las cosas. Hoy ha sido el día y, en casa, la cosa no ha ido del todo mal. Aunque uno, jartible como pocos, siempre quiere que todo vaya mejor. La reflexión paterna -en la materna cabe un mayor plus de comprensión- siempre bebe en las exigencias del mundo en el que vivimos y que tan puñetero se vuelve ya contra los buenos estudiantes como para que uno se conforme con ser un mediocre. Y mi conclusión es que los planes educativos nos están jodiendo -perdón- la sociedad. Y es conclusión también que todos somos demasiado lasos a la hora de pedir cuentas a nuestros hijos. Y, y ahí me duele, que, por encima de lo anterior, queda la exigencia personal, tan alejada, creo, de la que se creaban mis padres, incluso desde una posición de bastante peor formación, en beneficio de mi aprovechamiento. Creo que hay que recuperar aquel viejo espíritu que hace tiempo que entiendo de mayores exigencias para ellos mismos. Por la misma regla de tres, lo que no le haya exigido yo a mis hijos habrá comenzado por una falta de exigencia a mí mismo.

martes, 23 de junio de 2009

Llegaron mis vacaciones


Comenzaron el jueves pero, a decir verdad, no es hasta ahora que comience a notarlo. Quienes me conocen lo entienden. Quienes no quizá no tarden en hacerse cargo también de la situación. En la radio me dicen que hasta primeros de agosto. La Voz, por su parte, sigue esperando mis páginas dominicales. El Obispado, en pleno aterrizaje de don José, sigue requiriendo atención. Mi mujer ya tenía ganas de que pusiera orden en el despacho de casa. Mis hijos tenían también alguna petición que hacerme porque, es cierto, durante el año es tan difícil poder estar a todas... Hoy, sin embargo, me he dado el primer baño en la piscina del Club. Y semejante licencia, independientemente de lo que haya de llegar durante las próximas seis semanas, es tan inverosimil en mi agenda de previsiones habitual que como banderazo de salida no puede ser más emblemático. Llegaron mis vacaciones. Sin enjundia, sin profundidades, sin mayores explicaciones y, lo que es más importante, sin remedio. Inevitablemente. Y que se chinche a quien aún le tarden. Que ya me tocará a mí envidiarles cuando en pleno agosto me toque a mí aquello de la crisis post-vacacional. Mientras tanto, queda tanto para ello...

lunes, 22 de junio de 2009

Nada es ya como fue


El recuerdo es vago pero las sensaciones perdurables en el tiempo. Y si la endeblez del primero me hace sospechar de la ternura de una edad impropia como destino de la memoria, la fortaleza de las segundas apuntalan, así lo siento, la certeza de aquellas procesiones del día del Corpus Christi que, con mayor antigüedad, registran mi uso de razón. Imposible poner guarismos a la edad que yo tuviera. Pero eso da igual.
A ver... Les cuento. Caminaba, y lo hacía, seguramente, de la mano de mis padres. La imagen más recurrente en mi mente me sitúa, creo reconocer ahora, en la calle Manuel María González. Un auténtico mar de verde -sólo- cubre el firme destilando aromas que, desde entonces, caracterizaron para siempre la celebración de ese día de junio que me proporcionaba satisfacciones ciertas. Y no quiero pensar que por la cercanía del final de curso. Aunque lo sospecho.
Era por la mañana. Seguro. Y hacía un increíble calor que no recuerdo que me molestara de modo extraordinario. Más bien me divertía. Llegaba el tiempo, al fin y al cabo, de los helados, los pantalones cortos y la playa. Pero debía ser increíble porque sé que algunos de aquellos soldados que escoltaban el paso del Santísimo llegaban a caerse desvanecidos. Aquellos fornidos muchachos se caían y, con el tiempo, sirven para calibrar aquellas mañanitas de junio.
El recuerdo es vago, insisto, pero las sensaciones tan perdurables que, ahora que acabamos de salir de un nuevo Corpus matinal décadas después, es fácil establecer una correlación que sólo la edad termina cargándose. Ni el final del curso es motivo de satisfacción ni los helados ni... Ahora lo que pesa es el calor, aquél que ya «derritió el asombro eucarístico» cómo titulara sobre procesiones vespertinas. ¿Quién ha dicho que hace falta el mediodía para sufrir altas temperaturas?
Ahora, cuando las nostalgias que durante tanto tiempo han hecho soñar con aquellas mañanas se topan con el cambio obligado por el ascenso del Xerez o las razones que fueran, toca entender que nada es ya como fue. Partir desde esa base es fundamental para realizar ahora cualquier análisis.
(La Voz, 21-06-09)

domingo, 21 de junio de 2009

De Primera


Alguien va a pensar que no me gusta el fútbol. Nada más lejos de la realidad en el caso de quien, sin haber sido Puyol, recuerda aquellos tiempos de central en las alineaciones del Jerez Comunicación, equipo de compañeros periodistas. De algún ejemplar de la profesión en la provincia terminaré hablando, precisamente. Aunque son demasiadas las veces que se le ha podido llamar de todo menos compañero. Pero llegará luego.
Vaya, primero, unas líneas de Primera para ese equipo de futbolistas y técnicos que ha hecho vivir a la ciudad días de euforia que, fracamente, necesitaba como aliento, aunque fuera puntual y poco redentor de los males que sufren los jerezanos, para seguir tirando hacia adelante. El Xerez también me ha hecho vibrar a mí y los míos y bien que lo agradezco ahora que atrás quedaron los fastos y el último partido de ayer.
He leído mucho, incluso en blogs de aquellos que jamás se caracterizaron porque les gustase el fútbol. Más bien todo lo contrario en algunos casos. Pero ahora todos somos azulinos. Ésa es la fuerza del fútbol. Para bien y para mal. Y, en cambio éste que viste y calza, callado al respecto, aunque más por aquellos otros líos que me han tenido entretenido en la radio y el Obispado impidiéndome anotar nuevos posts.
Quede claro, sin embargo, que celebré, y de qué forma, el ascenso. De hecho, terminadito el partido con el Huesca cogí la moto, invité a mi hijo Sergio a que me acompañara, le atamos unas bufandas a los espejos retrovisores y, con una bandera, gastamos y desgastamos el claxon, las gomas de las ruedas y el depósito de la gasolina. Subimos a las plantas del Minotauro revestido de xerecista y acompañamos al autobús de los jugadores.
Yo también escuché aquellos deplorables gritos contra Cádiz, contra el Cádiz e, incluso, contra el presidente de la Diputación, aquél que olvidó lo que dijo no hace mucho del capitán Jesús Mendoza cuando, en público y ejerciendo de dolorido viudo agraviado, le llamó la atención en un acto que no tenía más sentido que el del reconocimiento en la institución provincial. El joven xerecista, con más clase en ese momento, le habló, a media voz, de calentón.
Y pidió perdón. Pero le recordó, a Francisco González Cabañas, aquello que le dijo sobre su abandono del pasado cadista para incorporarse al equipo de Xerez. Resentido y falso Cabañas que, en el fondo, no estaba más que vistiendo de amarillo una celebración que sólo merecía la palmadita en la espalda si la alegría, presidente, no le daba para abrazo. Pero azul, sólo azul tocaba vivir ese día. Eso sí que hubiese sido vertebrar provincia.
Luego apareció el otro, alguacilillo del presidente de la Diputación e indigno -justamente por ello, entre otras razones- de su eterno cargo de presidente de la Asociación de la Prensa de Cádiz, noble y centenaria institución que no merece más que lo mejor. Por eso no se merece, desde mi modesta impresión, a alguien tan escandalosamente forofo como Fernando Santiago que escribía, en Diario de Cádiz, toda clase de improperios contra jerezanos y xerecistas.
Busquen el periódico de este pasado viernes y analicen. Es una lástima, querido Fernando, que no pueda, por ocupaciones ineludibles, acudir mañana lunes a la manifestación contra la situación del periodismo. Sería una bonita ocasión para 'felicitarte' por lo bien que escribes. Lo mejor de todo es que, en Jerez -con X o con J, como quieras-, no estamos más que para festejos, ésos a los que gente como tú no estás invitado. Ésto es sólo para gente de primera.

domingo, 14 de junio de 2009

El Corpus 2009 desde mi cámara


















"La Eucaristía nos da fuerzas ante la crisis"


La Solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo ha sido celebrada esta mediodía en la Santa Iglesia Catedral del Divino Salvador con una misa pontifical que, con posterior salida procesional del Santísimo por las calles del centro de la ciudad, ha sido oficiada, por primera vez, por el nuevo obispo de Asidonia-Jerez, Monseñor José Mazuelos Pérez.
El prelado, quien ha contado con una treintena de sacerdotes concelebrantes y un templo lleno de fieles entre quienes se encontraban la alcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez, y diversos miembros de la corporación municipal, ha subrayado la idea de que "celebrando la Eucaristía nos hacemos contemporáneos del sacrificio de Cristo en la Cruz".
Monseñor Mazuelos, quien también habló de la Eucaristía como "el alimento que el hombre necesita de Dios, alimento de amor, de eternidad", señaló que Él es "el que toma los panes y los peces del hombre, el alimento puramente material, y los eleva". "Es un misterio de la esencia de nuestro Dios, y los ojos de nuestra fe certifican que ahí está Cristo" añadió.
Al respecto del Día de la Caridad que se celebra con motivo del Corpus, el prelado afirmó que "la crisis económica es la punta del iceberg de una crisis de valores". Mazuelos indicó que "ésa esa la crisis que tenemos, la de la dignidad del ser humano, enmedio de una sociedad en la que el dinero es el centro del mundo".
Su mensaje fue de esperanza, sin embargo: "Podemos sentirnos frágiles pero la Eucaristía nos hace fuertes frente a la crisis, el Señor no vive de espaldas a nuestras pesadumbres". "Dios está aquí, y nos ayuda a construir una sociedad más justa", apuntó en una celebración que se vió sucedida por la procesión que llevó al Santísimo en la custodia sobre carroza sacramental.
La procesión, matinal por primera vez desde hace más de treinta años, contó también con la presencia en la comitiva de pasos con Santa Rita de Casia, del convento de agustinas de Santa María de Gracia; San Juan Grande, patrón de la Diócesis; San Francisco de Asis, en el 800 aniversario de la Regla Franciscana, y la Virgen de la Salud Divina Enfermera, también procedente de Capuchinos.
(Nota de prensa de la Delegación Diocesana de MCS)

miércoles, 10 de junio de 2009

El mejor año se nos va al traste


Si hay o no penitencia suficiente para aquellos que no marcaron en Tenerife es una duda de la que no tengo especial empeño en salir. Y debo desmentir rotundamente que la lata que Nino, peligroso delantero isleño, diera a la defensa azulina hace ya cuatro días pueda ser objeto de excomunión. Bromas a parte, lo cierto es que nos hubiéramos ahorrado algunos dolores de cabeza. Y la alcaldesa no se hubiera visto forzada a alegar problemas de agenda cuando lo que defiende es su crucero, al que también tendrá derecho digo yo. Pero no cabía otra decisión, en cualquier caso, que pasar a la mañana Pontifical y Procesión del Corpus Christi. Aunque ello tenga como consecuencia directa la supresión de las alfombras y, quizá, algunos altares.
El mejor año se nos va al traste. Estaban previstos tapices florales de las hermandades del Perdón, Transporte, Angustias, Sagrada Cena, Candelaria, Amor y Sacrificio, Clemencia, Desconsuelo, Soberano Poder, Consuelo, Tres Caídas, Amargura, Prendimiento, Redención, Vera-Cruz, Sagrada Lanzada, Mayor Dolor, Jesús Nazareno, Buena Muerte, Yedra, Exaltación, Soledad, Santo Entierro, Resurrección, Salvación, San Rafael y Sagrada Mortaja (aunque estas tres últimas no sean exactamente cofradías). Casi todas ellas se quedarán sin poner porque los horarios que pueden ocuparse para ello lo hacen muy complicado. Quedarán aquellas vinculadas a los altares, para los que se comprometieron Perdón, Clemencia, Mayor Dolor, Tres Caídas, Buena Muerte, Santo Entierro, Resurrección, Divina Pastora o Santa Gema.
Las menciono a todas para que quede constancia de los empeños puestos sobre la mesa, aunque no quedarán manifiestos sobre el empedrado de las calles del centro. Y, con todo, Cristo Sacramentado saldrá a la calle ascienda o no el Xerez, haya o no celebraciones, sean colocadas o no alfombras, altares u otros elementos ornamentales. Hay que quedarse con ello y no lamentar más de lo debido la ausencia de elementos que, se quiera o no, serán siempre secundarios. La lástima, sin embargo, es que se trataba de muestras de amor a la Eucaristía que se quedarán sin expresar, con el valor que tienen en estos tiempos que corren. Ahora lo que toca es que cuantos dieron la tabarra por un Corpus matinal no falten ni a la Pontifical que oficiará Monseñor José Mazuelos ni a la procesión. Paso lista y no atiendo a componendas.

domingo, 7 de junio de 2009

La sonrisa ursaonense


Nacer el día de San Dionisio Areopagita parece tener un cierto significado cuando, cuarenta y nueve años después, entra en Jerez de la Frontera para hacerse cargo de su Iglesia diocesana. Pero no se equivoquen, no es una entrada que tenga nada que ver con aquella del Rey Sabio que, por coincidencia con aquel 9 de octubre, nos diera Patrón local en su día. No, ni mucho menos. Ni lo es por la naturaleza de su ministerio ni tampoco, menos aún, por su carácter.
Alguien dice, con todo, que ya irá sacando el genio que este ursaonense (que ése es el gentilicio de su Osuna natal) lleva dentro, que haberlo haylo según parece. Incluso él mismo avisaba cuando le hacía aquella primera entrevista y yo procedía, con cuidadosa generosidad, a ponderar lo campechano de su trato. Pero, a decir verdad, lo primero que sugiere la conversación inicial es un punto de retraimiento. Primera diferencia con aquél a quien sucede.
Muy poco después se expande. Ocurría esta semana cuando, un paseo mañanero entre el Obispado y la radio, me lo descubría con la llaneza que le advertía cuando el pasado 20 de marzo era presentado tras el nombramiento del día anterior. "Don José, y este año no habrá duelo con el eterno rival, ¿no?", le preguntaba, materializado el descenso del Betis y sabedor de su sevillismo. Qué curioso, porque don Juan apuntaba al otro lugar del expectro futbolístico hispalense.
"Pero me da pena, Gabriel", me respondía dándome un caramelo y comprobando, de paso, ese 'xerecismo balconero' que, apuntando otro duelo distinto, se esperaba que vistiera la ciudad de fiesta en este mismo fin de semana de la celebración del primer templo diocesano. Un amigo me había dicho un par de días antes "¿has visto lo bonita que nos han puesto la Catedral para celebrar el ascenso?" Es un chiste que no me atreví a compartir con él, claro. Aunque creo que se reiría. Sí.
Su sonrisa es llegadiza, cercana, poco ensayada, nada impostada. Y el pastoreo que tiene por delante no tendrá en ella más que una buena embajadora. Tampoco hacemos mal negocio poniendo a un médico al frente de Asidonia-Jerez. Aunque "son los males del espíritu los que más cura necesitan", como ya nos diera tiempo de escucharle. Tiene pinta de buen tipo y tipo de alguien sencillo. "Don Rafael con estudios", decía alguien amigo de las etiquetas fáciles.
Sea como fuere su impronta comienza a pastorearnos desde esa primera imagen bonachona que, ahora que tiene el báculo en la mano y la mitra en sus sienes, quizá pueda acompañar del tono que su autoridad le confiere. Y con todo no creo que pueda apartarse demasiado de esas trazas que nos regala para comenzar su episcopado. Buen pastoreo, monseñor Mazuelos. Buena mano, don José.
(La Voz, 07-06-09)

Habemus episcopum


Si no hubieran entendido cómo he dejado pasar en blanco el 6 de junio, día importante donde los haya para la Diócesis, deben conocer, algo que imaginarán fácilmente, que desde que, aún de madrugada, me quedara esperando el texto definitivo de la alocución de Monseñor Mazuelos a la mañana siguiente y hasta que, veinticuatro horas después, me despidiera de los voluntarios con los que compartimos copa distendida para brindar por el nuevo obispo y celebrar lo bien que había salido todo no hubo ocasión alaguna para anotar en mi bitácora anotación alguna, por mínima que fuera.
Ahora ya celebró acción de gracias don José, y vi en los periódicos el reflejo que los compañeros dejan sobre papel prensa del acontecimiento (desde los que se quedaron cortos convencidos de que el Hércules daría primacía informativa al ascenso matemático del Xerez el mismo sábado hasta despliegues tan espléndidos como los de La Voz o Diario). Y en torno a mí comienza a hacerse un silencio largamente ansiado y nulo, verdaderamente, durante todo un mes de mayo en el que se han debido conciliar preparativos en el Obispado y Catedral, la Feria y la Romería del Rocío.
Todo pasó y todo comienza. Y aunque a continuación vuelco textos que señalan las virtudes del nuevo pastor diocesano asidonense quede esta primera constancia de mi estado de ánimo. Quede expresado con la famosa frase rociera, que como hace unos días apenas tuve tiempo de formularla ahora viene como anillo al dedo aplicado también a la post-ordenación episcopal y toma de posesión. ¿Que cómo me siento? Cansado pero contento, maravillosamente contento. Repito, sin embargo, es ahora cuando comienza todo. ¡Que sea para bien!

viernes, 5 de junio de 2009

Preparando la toma de posesión


Tres comisiones que fueron creadas para ello en su momento -las dedicadas a Liturgia, Acogida y Prensa- vienen ultimando los detalles organizativos de la celebración de la Ordenación Episcopal y Toma de Posesión de Monseñor José Mazuelos Pérez, nuevo obispo de la Diócesis de Asidonia-Jerez. Tendrá lugar mañana sábado, día 6 de junio, a las 11,00 horas en la Santa Iglesia Catedral.
Unos sesenta voluntarios, procedentes de los más diversos ámbitos, se están ocupando, durante estos días, de aspectos como la recepción y acogida de los cardenales, arzobispos y obispos que concelebrarán esta ceremonia presidida por Monseñor Carlos Amigo Vallejo, así como la acomodación ese día en la Catedral y la acreditación y atención de los periodistas que cubrirán el acontecimiento.
Yendo por parcelas, la Comisión de Liturgia baraja ya una cifra superior a los doscientos concelebrantes -entre obispos y presbíteros para una ceremonia que dispondrá la procesión de entrada en la Santa Iglesia Catedral desde la cercana Casa de la Iglesia (Bertemati), cuyas dependencias se están acondionando estos días para convertirse en una gran sacristía en la que sean revestidos.
Junto al presbiterio diocesano se espera una importante presencia de sacerdotes hispalenses compañeros del nuevo obispo. Diecisiete obispos tienen confirmada su presencia: el Cardenal de Sevilla, el Nuncio, el Arzobispo Castrense, el Cardenal de Bogotá, el Arzobispo de Mérida-Badajoz, el Secretario de la CEE y Auxiliar de Madrid, y todos los andaluces, el de Canarias y el Auxiliar de Bilbao.
Unas 1.600 personas en la Catedral
Se espera un lleno absoluto de la Santa Iglesia Catedral, acondicionada para poder acoger alrededor de 1.600 personas. Entre ellas, junto a las autoridades y otros invitados, se pretende dar amplia cabildo a los fieles en general. Unos y otros sumarán una cifra de alrededor de 1.500 personas junto a las que se encontrarán más de medio centenar de periodistas y los miembros de la Coral Catedralicia.
Banderas, reposteros y colgaduras lucen ya en la torre, reducto y entorno del primer templo de la Diócesis que dispondrá de pantallas ubicadas estratégicamente en el interior para mejorar las posibilidades de visión del conjunto de la ceremonia.
Aquellos que no puedan estar en la Catedral contarán con cuatro medios que ofrecerán la totalidad de la celebración en directo: dos televisiones -Onda Jerez y Popular TV- y dos radios -Radio María y Cope-Jerez-. La Delegación Diocesana de Medios ha acreditado a un total de 56 profesionales de televisiones, radios, periódicos, agencias y páginas de Internet.
Además de los ya mencionados, están acreditados Diario de Jerez, La Voz, Información Jerez, Viva Jerez, Información El Puerto, El Mundo, Agencia Efe, Localia, Radio Jerez, Onda Cero, Canal Sur, Cofrademanía, La Levantá, Sercofrades y la propia web oficial del Obispado.

(Nota de prensa de la Delegación Diocesana de MCS)

El romero de Manolito


Los signos bendicen realidades como El Rocío al punto que consiguen que muchos los vean, con exagerada predisposición a creerlo así, como el sancta santorum de aquello en lo que creemos. Y algo parecido ha ocurrido siempre con las matas de romero. ¡Cómo llega a sobrevalorarse cada uno de sus brotes verdes! Y en el fondo está bien ese aprecio, que estos sí que pueden ayudarnos a salir adelante y no aquellos que alguien dijo ver al final del oscuro camino de la actual crisis. Un plus de fe es lo que está haciendo falta. Y los rocieros sí que venían cargados de ella. ¡Qué entrada la de la Hermandad del Rocío jerezana!
Pero ayer me faltaba quién más disputó siempre en defensa de cada una de esas matitas insignificantes. Y lo serían, sí, pero que a base de ir acumulando de aquí y de allí terminaba reuniendo el más prestigioso botín. ¡No estaba Manolito Mesa! ¡Cómo se echaba en falta! Tan recordado cuando las pasadas Cuaresma y Semana Santa fueron las primeras en notar la ausencia de su sencilla naturaleza, ahora vuelve a aparecer el recuerdo a falta de su abrazo, con infantil y gracioso egoismo, a ese mazo de romero que siempre conseguía llevarse a casa sin que nadie osase quitarle siquiera una brizna.
Él no entendía que el romero que traía la Hermandad recién llegada del Coto era para repartirlo y que cuanto más y mejor se distribuyera mejor se alcanzaba el sentido de semejante gesto simbólico. Y con todo, ¡qué más da! Él era así de sencillo para todo. Y sus trazas humanizaban sorprendentemente hasta los momentos más solemnes. Que se quedara con ese romero no era sino objeto, siempre, de apacibles sonrisas entre quienes bromeaban queriéndole quitarle alguna matita que otra. Y cuanto más lo abrazaba para defender su posesión más fragancia desprendía el oloroso arbusto doñanero.
Él conseguía sacar partido a cuanto llegaba a sus manos para, aunque fuera indirectamente, todos tuvieran algo de aquello que simboliza el romero. Las gracias de la Virgen llegan hasta Jerez tras la Romería de Pentecostés. Las glorias de la Señora del Rocío apuntan a permanencia entre nosotros. Las virtudes señeras de la Madre del Pastorcito Divino alumbrarán todo un año de esperanza puesta bajo el manto bendito de María Santísima. ¡Qué gozo más grande haber podido beber en el pocito de la Aldea para, desde el gaznate virtual de nuestro corazón poder humedecer ahora la seca tierra jerezana.
Pom, pom pom pom. Pom pom pom. Pom pom pom. Pipiiii piripipipi piripipiiiii... Vaya. Otra vez el pitero. Pero ahora no amanece la Romería. Es el último aliento de aquél que abre comitiva. Y no se trata de alarma alguna de mi teléfono móvil. Es real. En Cristina. La tracción animal, primero, y la mecánica, después, pasan ya ante la carreta del simpecado. Se despiden. El tamboril parece ir apagándose. El pito evidencia el cansino momento del adiós. Pasan los últimos coches. Ahora sí que se terminó todo. Para Manolito es Rocío eterno en aquellas 'Marismas Azules' que alguna vez fueron cantadas. Para nosotros... la espera.

(La Voz, 05-06-09)

jueves, 4 de junio de 2009

La venganza de Marismillas


Ya los tiene en su seno la explanada de la ilusión primeriza. Y, la verdad, aquella primera amanecida en Doñana de hace ya una semana no quería siquiera imaginarlo. Nadie estaba dispuesto a pensar que Marismillas aguardaba nuestro regreso. En efecto es una especie de maldición aquella que llega desde un paraje condenado a saber de la Virgen sin verla. Ni sus arenas apenas preocupantes para nuestros vehículos ni su palacio sugerente escoltado por agradables abrevaderos ni los pinos de los primeros encuentros fisiológicos. Todo de cuanto dispone el lugar queda en ese sitio para siempre, siempre a treinta kilómetros de El Rocío.
Yo apuntaba sugestivas visitas de María Santísima cuando, en mi Pregón de la Concha, hablaba del 'Jardín de la Virgen'. Pero, a decir verdad, hay distancias que son un castigo. Y los ufanos rocieros que tan festivamente pernoctaron entonces 'chinchando' a este trozo de Coto que quedaba atrás ahora se encuentran la venganza correspondiente. "Me dejásteis aquí, os olvidásteis de mí avanzando hacia la Aldea, y ahora me toca veros pasar cargados de nostalgia", parece decir Marismillas con aires de sentenciosa altivez. Así imagino el reencuentro entre romeros y paraje. ¿No son ustedes capaces de entenderlo así?
Ea, pues ya se encontraron comitiva y paraje. Y las cosas siempre son así, cargadas de esa melancolía extraña, pero, como el Parque no es rencoroso sino todo lo contrario, pronto favorece una noche bonita, la última en la paradisíaca reserva biológica. El mejor cante, el menú más delicioso y hasta el pescaito que una vez se instituyó en costumbre y signo de esa comunión linda de la ida pero aún más entrañable a la vuelta... Así es Marismillas. Última noche, embrujo elocuente, primer sueño con el siguiente Rocío, anuncio de la llegada a Jerez que hoy vivirán los romeros y también cuantos los esperarán a la vera de San Juan Grande.
Decía el martes que todo concluía y me equivoqué. Que le pregunten, si no, a cuantos aún están por llegar, a cuantos han pasado la noche en Marismillas, a cuantos aún no se han dado la buena ducha que otros ya disfrutamos -ni falta que les hace, de momento-, a cuantos se encuentran aún en la más deseable ausencia de civilización, a los que habitan todavía en la casa que reina la Naturaleza que es fuerza tan superior a la del hombre que éste aprende, necesariamente, a doblegarse a las gracias de la Creación. ¡Cómo no creer en Dios cuando uno se ve inmerso en ese admirable paraíso!
Despertarán este jueves. Y lo harán tanto en la tienda de campaña anclada en el lugar de marras como en el alma romera devuelta a la cotidianeidad de todo un año de nueva espera. Despertarán, y con ellos Jerez que ya los aguarda con una insatisfacción que colmatar de gozo esta tarde. Cuantos no han podido ir este año a El Rocío -habemus crisis- esperan verse envueltos hoy del aroma fragante del romero que, si Dios quiere, podrán repartir a su entrada. Ellos saben que van con esa matita mucho más que una especie -protegida por cierto- olorosamente agradable. Con ella entregan el alma cultivada en Doñana. ¡No retrasaros!

(La Voz, 04-06-09)

miércoles, 3 de junio de 2009

Te envidio 'Sanluco'


Estar ya en Jerez mientras la Hermandad hace el camino de vuelta es muy puñetero. Ni haber regresado por la playa esa tarde de lunes, la que canta la famosa sevillana, es bálsamo lo suficientemente efectivo. El arenal costero de Doñana, de hecho, se convierte más bien en precipicio de todas las nostalgias habidas y por haber. ¿O no lo es esa verdadera autopista tan recta, pese a sus kilométricas trazas, como para enseñarnos el faro de Chipiona cuando uno aún quiere aferrarse a los recuerdos rocieros? Pues eso. Jorobado, por no decir otra cosa, me siento por no seguir pisando la vía pecuaria.
Juan Pedro y Olga, sin embargo, sí que vienen haciéndolo. Y cuando me despedí de él en la Aldea -cantábamos entonces el "lágrimas tengo en los ojos cuando el lunes por la tarde..."- no pude evitar decírselo: "Te envidio, 'Sanluco'". El extraño sobrenombre es regalo de este Rocío recién terminado. En el camino de ida, en uno de esos rengues tan jacarandosos que hemos disfrutado, llegó Juanete Tejero -personaje donde los haya- y, fijándose en su apariencia, le dijo con desparpajo: "Pare, tú eres 'sanluco', ¿no?" Cuando todos nos quedamos mirándole comenzamos a ver a un hijo más de la barra del Río.
Tío dispuesto donde los haya, el rebautizado romero dejó en Picadueñas algunas de las cosas más queridas de su día a día cotidiano. Incluida la virgencita del Rocío que, en su hornacida callejera, es centro de atención de la calle Del Pino. Pero regresará, y es su primer camino, tan lleno que no olvidará la experiencia. Más bien comenzará a ver a la pequeña imagen en la que tantos besitos dejan a María Santísima los críos de la zona, incluidos aquellos que ya pasan de los treinta e igualmente crecieron con la idea de venerar por siempre a la Reina de las Marismas. ¡Cuánto rociero ha dado Picadueñas!
Ahora cruza el corazón del Coto acompañado de su novia. Y el canalla se reservó el venado para el primer almuerzo de la vuelta. Ayer se lo 'jalaban' él y su novia. Pero no lo lamentaremos. Que para el recuerdo quedaron la carrillada de El Cancelín o las albondigas de la noche anterior. ¡Qué tío más 'apañao' Juan Pedro, nuestro 'Sanluco'! ¡Y cuántas veces se quedó el 'galloper' que conduce! ¿Quién te estará sacando de la arena ahora que no está cerca Fefo? Y, sin embargo, cuanto te envidio, querido amigo. ¡Ay, qué dolor! ¡Cómo me acuerdo de él, Dios santo, a todas horas desde la mañana de ayer martes!
Me queda el teléfono. Pero hasta eso da rabia porque Doñana está como si le hubieran inyectado un plus de cobertura. Y siempre consigo localizarlo para que termine más celoso tras su relato. ¡Cómo está disfrutando! ¡Bien que se lo merece! Él y Olga, quien no parará de decirle por donde tiene que coger y cómo hacer para que todo salga a pedir de boca. A ella le sale de suyo ir mandoneándole. Y hasta ello se echa de menos cuando has adelantado tu regreso a Jerez. El Pilón de la Raya, El Cancelín o Palacio ya les han visto pasar. Hoy serán los cerros y esta noche Marismillas. ¡Cómo te envidio, leches!

(La Voz, 03-06-09)

martes, 2 de junio de 2009

El patrimonio de Realito


Ángel Fernández, un cofrade del Amor sobrado de planta así como animoso rociero que canta como los ángeles, toca el tamboril con soltura. Su sevillana es una verdadera evidencia: "Ya no hay más Dios que el dinero; ésa es la única verdad". Sobre el poyete del porche de la casa, toda la calle Ajolí asiente ante aseveración tan certera. La crisis tiene a todos castigados de uno u otro modo. Y por mucho que la Romería está evadiendo de las preocupaciones a los rocieros no es menos cierto que termina apareciendo hasta en las sevillanas. Vaya por Dios. Y no es ésta la única sevillana que asoma al respecto.
Entre letra y letra no faltan las sentencias de un joven de sesudas reflexiones. Se llama Antonio pero todos los conocen mejor por un sobrenombre con sonoras resonancias gitanas: Realito. Nieto de Tío Realo, patriarca octogenario santiaguero, él asegura que tras haber vivido su primer Rocío ya puede morirse. No por Dios, le digo entre una rotundidad innecesaria y la esperanza de que explique semejante sentimiento. Y lo cierto es que ya hizo un Camino de dulce. Vayas risas las compartidas, vayas anécdotas las protagonizadas, vayas poemas los del amigo que, además, escribe la mar de bien.
Realito se adelanta a retirar todo atisbo de fundamento a aquello que la sevillana pregonaba: "A mí no me hace falta el dinero, mi mejor patrimonio son esta buena gente, mis amigos; con ellos no necesito más". Que estamos tomando copas es una realidad empíricamente demostrable. Que sean los efluvios alcohólicos los que provocan tales exaltaciones de la amistad es, sin embargo, otra cosa. Aquello le sale del alma. El hombre está henchido. Ahora, además, ya se lleva las emociones vividas cerca de la Virgen en una procesión que la ha mostrado a los rocieros presentes en la Aldea, menos por la crisis.
La evasión se ha acabado. La Romería ha concluido. La Pastora de las Marismas recibe la despedida de las hermandades. Y si la fiesta consiguió hacer olvidar -aquello de ahogar las penas, ya saben- ahora, desgraciadamente, todos nos toparemos de nuevo con la cruda realidad. La reencontraremos, con todo, más morenos por el sol de las tierras almonteñas y llenos de la Virgen. Pero con los bolsillos más vacíos si ello era posible. Los creyentes, aún así, intentarán confortarse con el cargamento de gracias marianas recién consumidas. Y tanto éstos como los que no tengan fe hablarán con pasión de lo vivido.
El patrimonio de Realito. Eso queda enmedio de la desazón por haber gastado lo que no podíamos en El Rocío. Pero el pensador que exaltaba la amistad de ese modo lo dice tan convencido que ya me apunto a creer que el dinero no es importante. Otra sevillana, que habla de reyes y príncipes sobrados de posibles pero carentes de amigos, salta recién terminado el alegato de marras. Mientras tanta pasa por delante de la casa un grupo de romeros cuyos rostros dejan caer todo excepticismo al respecto. Ellos se lo pierden porque es hora de ir buscando consuelos a los que aferrarse. El Rocío ha terminado.

(La Voz, 02-06-09)

lunes, 1 de junio de 2009

De Primera


Así es este Rocío que ya termina, al menos en esta Aldea tan singular. El que se ha quedado al borde del alambre de Primera es el Xerez. Ésta era la 'Romería del Ascenso', como ha sido bautizado por no pocos rocieros que vistieron su todoterreno de banderas azulinas para un Camino que incorporaba esa adelantada alegría que, finalmente, sigue siendo virtual. De primera, así unos días para llegar hasta la Virgen. De lujo, como traduciríamos de modo certero al recordar la altura de la devoción depositada ante la Divina Señora o las convivencias brotadas de modo natural con una copa de vino en la mano.
Pero la expresión ha adoptado dimensión especial cuando el padre Alexis ha dicho, en su homilía de la misa de una de la tarde, que íbamos a celebrar "una Eucaristía de primera". El templo, lleno de gentes con el cordón morado en el cuello, fue marco de miradas cómplices entre jerezanos que acababan de dejar, al descanso, un 2-2 del partido del Hércules que no despejaba la incógnita sobre si sería en El Rocío que llegara esa circunstancia soñada. Realito dice que sí pero como no es hasta última hora que se aplique ese gol average, que llaman, y que el Xerez le tiene ganado al equipo alicantino... Pues eso.
Lo del dominico en la predicación, sin embargo, es otra cosa. "La Hermandad de Jerez tiene que ser de primera", dice. Y, claro, ello poco tenía que ver con la cuestión futbolística en boga. Alexis se refería a la altura de miras de los rocieros locales. Aunque no era a ello lo que tenía en cuenta cuando la tarde antes, según una leyenda urbana que no he podido confirmar, aparecía con camiseta azulina celebrando espléndidamente el 3-0 de Chapín frente al Eibar. Qué arte! Salvo que también fuera verdad que aquello ocurriera junto a las carreta de Cádiz. Qué guasa! Pero no creo, ¿verdad?
La homilía, sin embargo, no sabía más que de otros ascensos más dados a esa elevación espiritual a la que la fiesta de Pentecostés invita. Y, mal que nos pese, no parece que aquí se trate de ganar el partido propio y esperar a que pierda el rival con el que nos juguemos plaza alguna en categorías superiores. Para categoría superior, las 'Marismas Azules'. "Allí sí que seremos de primera" señala. Qué malarate! Pues, aún deseando que ello sea lo que ocurra cuando nos llegue la hora final, quizá mejor que tarde en llegar. No? Ése es otro Rocío, y las arenas de su camino ya las estamos pisando en este mundo.
A la salida de la misa me entero de que el partido, a punto de finalizar con aquel empate mencionado, se ve pendiente de un penalti en contra de lo que a Jerez y al Xerez conviene. Doy dos pasos más bajo la concha de la fachada de la ermita y, por teléfono, me dice Miguel Lloret, desde el Hotel AC en el que se han concentrado los jugadores, que lo han fallado. A ver si ese fallo ha sido cosa de la Virgen, que no ha querido quitarnos del todo la posibilidad de celebrar ya el ascenso. Pero ya me dijo Miguel Rubio, antes de salir de la ciudad, que no se me ocurriera pedir a Ella cosas de ese tipo. Da igual, ya somos de primera.

(La Voz, 01-06-09)

Eduardo Espinar, guarda del Coto


El abandono de un caballo salvado de una muerte segura permitió, durante el Camino, el contacto con Eduardo Espinar, celador del Parque Nacional de Doñana como reza el rótulo de su pecho. El guarda del Coto, que es más castizo nombre para una responsabilidad a la que tanto respeto tienen los rocieros en general, es heredero de una trayectoria familiar que cumple ya su séptima generación. En la cola de la comitiva jerezana lo encontramos y el aviso a la reserva biológica no pudo tener más rápida respuesta con su llegada.
-¿Son muy comunes casos como éste del caballo abandonado?
-Los encontramos, sí, aunque, quizá, no en estados tan preocupantes. Suelen dejar caballos que no se encuentran bien y, si éstos no pueden seguir porque estén congestionados como éste, lo acercan en algún punto en el que haya agua y se aconseja que regresen a recogerlo con algún vehículo. Pero en las condiciones de éste, abandonado y atado a un árbol como están ustedes viéndolo, no es muy común. Si no lo ven ustedes no hubiera podido sobrevivir. Y eso no es tan normal. Puede aparecer algún caballo pero pronto ha aparecido normalmente el dueño, que se ha identificado a la Hermandad, y se ha ocupado de los costes de su retirada.
-Aunque ustedes, normalmente, no es con este tipo de animales con los que más trabajan en un lugar como éste son, seguro, personas muy adecuadas para darnos un consejo al respecto de la atención de los caballos en la Romería del Rocío. Dígame alguna.
-Primero, que hay que tener en cuenta que un caballo no es un vehículo, aunque sea tracción de sangre como se dice. Hay que cuidarlo como si fuera una persona. Si usted va andando por el Coto se tendrá que parar a tomar un respiro antes de continuar el Camino. Pues el caballo igual, sobre todo porque en general no están acostumbrados a andar por las arenas y en estas condiciones de calor sino a hacerlo en un picadero. Aquí el caballo se deshidrata. Hay que darles de beber y de comer correctamente. Nosotros trabajamos también a caballo y muchas veces salimos a trabajar a las seis de la mañana para que el caballo trabaje aliviado. Regalamos tres horas de nuestro trabajo si hace falta para ello.
-Deberían conocer los rocieros, por tanto, que somos una molestia real en el Parque. Nuestra presencia hace que ustedes se multipliquen, ¿no?
-No quiero decir que el paso de ustedes por el Coto nos dé lata. No en balde pasan por aquí muchos aficionados al caballo de verdad y se portan muy bien con los animales. Éste tipo de rociero se preocupa de que el caballo coma antes que él incluso. Pero, por desgracia, existe todavía otro tipo de trato a los animales. Y eso lo estamos viendo también estos días. Lo cierto es que algunos piensan más en sacar al caballo aquello que les ha costado y eso no puede ser.
-¿Tratan al animal en términos de rentabilidad?
-Claro, y eso no puede ser. Hay que mirar por ellos.
-Y si nos apartamos de mayo y de El Rocío, ¿cuál es su trabajo a lo largo del año?
-Pues hay un poco de todo: vigilancia del Parque, control de aves, seguimiento de nidificación dependiendo de las épocas (ahora tocan las rapaces), ahora empieza también la época de incendios y nos dedicamos a atender a la vigilancia en ese sentido... El trabajo nuestro es muy diverso.
-¿Es alto, en estos momentos, el riesgo de incendio en el Coto?
-Ya sí. El campo tiene mucho pasto y estos días de levante avivan cualquier colilla o cualquier otra chispa, mucho más que un día de calma o de fresco.
-Permítame, ahora para finalizar, un homenaje a tantos 'espinares' como han dedicado su vida a esto mismo que usted hace. ¿Siete generaciones ya?
-Yo hago la séptima generación. Mi familia siempre se ha dedicado a esto aunque no como se trabaja ahora sino viviendo aquí mismo y dedicando a ello las veinticuatro horas del día. Y así durante toda la vida.
-Gracias por tan rápida respuesta a nuestra llamada así como por atendernos a nosotros ahora.
-Gracias a ustedes por acordarse no sólo del cante, del baile y de lo bonito de El Rocío sino también de estos otros aspectos quizá no tan agradables del paso por Doñana.

(La Voz, 31-05-09)