lunes, 13 de mayo de 2013

Y al séptimo día, el González Hontoria descansó (Domingo de Feria)

Visitantes de flamencas se despiden de la Feria.
Se acabó lo que se daba. La Feria del Caballo fue clausurada anoche tras una postrera jornada que confirmó la calma generalizada que cada domingo de esta fiesta en el González Hontoria venía ofreciendo en ediciones anteriores. Muchas ausencias, un sol de justicia y ganas de dar por concluida una convocatoria que se prepara para los balances posteriores. Ni las rebajas anunciadas, que haberlas las hubo, permitieron disfrutar de un último día con más público. Pero la siembra para próximos años está hecha. Y la necesidad hará costumbre esa invitación a los precios populares.

El mediodía de ayer, por su parte, acogía la entrega de los premios del Concurso de Enganches así como del premio del Concurso Morfológico convocado al amparo de Equisur 2013. “Ha sido un acto magnífico, con una gran presencia de público y un colorido acorde a la dimensión del acontecimiento”, reconocía un rato después el concejal Antonio Real. El delegado de Turismo, Cultura y Fiestas desvelaba su satisfacción tras este encuentro en el Depósito de Sementales, que suma y sigue en su protagonismo tras la reversión a la ciudad desde el Ministerio de Defensa.

El responsable político de esta fiesta del parque González Hontoria está recibiendo los datos que cuantifiquen, en cuanto esté listo el correspondiente balance, el éxito de la Feria del Caballo de este año. En cualquier caso, valga un dato de ocupación hotelera que confirma la impresión de que las mejores jornadas no han sido precisamente las del fin de semana. Es el propio Real el que asegura que la noche del sábado no se llenaron los establecimientos de la ciudad y que el pico de ocupación se encuentra entre el 85% y el 90 % registrado el jueves y el viernes.

“Creo que todo ha salido a pedir de boca aunque haya cosas que haya que arreglar para otros años”, asegura mientras piensa ya en la edición del año próximo. De momento, alguna de las novedades puestas en marcha para elevar la presencia de público en un día como el domingo (rebajas de precios tanto en casetas como en atracciones) no terminaron de arreglar el languidecimiento de esta última jornada. Los que acudieron fueron llegando tarde, si acaso a tiempo de ocupar una caseta y almorzar, y se fueron más bien temprano.

Entre las pocas casetas atestadas de verdad y las que mostraban prácticamente todo su aforo vacío, no faltaban las que a las tres de la tarde ya había cerrado sus puertas. Una lástima, aunque solo alguna muy contada llegó a ese extremo. Por contra, no faltaron las que se sumaron al llamamiento municipal de arreglárselas el domingo con precios más asequibles a fin de alentar la presencia de público en el González Hontoria. Vaya un ejemplo: la Hermandad de Pasión hacía rezar en su fachada una sugestiva incitación al consumo: “Guiso del día más bebida, 3,5 euros”. Difícil negarse a entrar.

Pero, sobre todo en ciertas zonas del recinto ferial, las pizarras se prodigaban de modo extraordinario. La de la Peña Flamenca El Pescaero decía lo que sigue: “Hoy, último día, huevos con patatas, lomo y pimientos, 3 euros en mesa”. Item más: “Plato de paella, gratis en mesa”. Claro, de ese modo solo cabía encontrar, justo en frente, más de lo mismo. La Redención Salesiana repetía la invitación a paella gratis y, además, colocaba en la puerta a un relaciones públicas que, con gracioso acento cubano y sombrero, jaleaba señalando la posibilidad de entrar en la caseta.

Las casetas no se llenaban. Pese a todo. Solo algunas, como la Caseta de los Mayores, registraban una afluencia espectacular. Pero esa ya tiene buenos precios durante toda la Feria y ello ayuda a mantener la tendencia sin necesidad de pluses sobrevenidos el último día. “El Ayuntamiento lo que tiene es mucha cara anunciando medidas de este tipo sin consensuarlas antes con los caseteros”, apunta sin embargo un responsable de caseta algo indignado aunque nada molesto con la caja que, finalmente, estaba haciendo la entidad que la tiene concedida.

La alegría consumista podía parecer algo mayor en la Calle del Infierno. Al fin y al cabo, las ‘calderas de Pedro Botero’ que dan nombre popular a la zona de los cacharritos queman menos si lo hacen mientras procuramos diversión a los niños. La primera Feria del Caballo con dos días de atracciones a la mitad de precio dejó algún rédito a las empresas de los tiovivos, las pistas de autos de choque, los ratones vacilones varios o esa gran noria que ha visitado la ciudad estos días permitiendo otear el horizonte desde más arriba que otros años. Algunos dicen que para ver mejor el final de la crisis.

Ahora que la Feria del Caballo ha concluido, toca ir haciéndonos eco de un balance que permitirá brindar optimismo o no de cara al futuro. En cualquier caso, que los visitantes del González Hontoria han controlado su gasto está claro. Pero lo cierto es que ya antes de inaugurar la de este año, la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, anunciaba que la próxima edición rescatará los fuegos artificiales habituales cada año para abrir y cerrar la fiesta. Y a ese canto a la esperanza es al que muchos se apuntan para adivinar que en 2014 llegarán renovadas alegrías al recinto ferial.

(La Voz, 13.05-13)

domingo, 12 de mayo de 2013

La entrega del Caballo de Oro abrió una jornada cuajada de otros muchos brillos (Sábado de Feria)

Sebastián Zambrano recibió el Caballo de Oro de manos del ministro Arias.
El caballo se cría en el campo. Y ello, a menudo, se olvida con facilidad cuando tan espléndidos ejemplares pasean por el parque González Hontoria durante la Feria de Jerez, que hoy alcanzará ya su clausura en medio del cansancio por los momentos disfrutados y la lástima por las ocasiones que se hayan podido perder. El Depósito de Sementales fue ayer marco del espectáculo grandioso del reconocimiento de esta verdad palmaria. Mientras el veterano Sebastián Zambrano recogía el Caballo de Oro que anualmente se concede, más de uno era llevado por su mente a El Tesorillo.

Hace un año descubrimos sobre una loma de los aledaños de El Portal, a unos kilómetros de Jerez, esa finca en la que un vejete de mano diestra dictaba a un caballo tordo los movimientos que debía realizar. Acudir entonces a potenciar la llamada de atención de los vecinos a que este premio llegara también a gente sencilla como el susodicho generó ayer el cierto orgullo de cuantos levantaron una voz escuchada por el jurado. A solo unos metros del recinto ferial, el ministro de Agricultura, Miguel Arias, y la alcaldesa, María José García-Pelayo, presidían este acto de justicia.

Sebastián Zambrano Sánchez ha comenzado su intervención diciendo “he dedicado toda mi vida al caballo” y seguidamente narró cómo recibió la noticia del galardón: “Una tarde, me quedé muy sorprendido cuando recibí una llamada y me dijeron soy la alcaldesa, y vamos a entregarle el Caballo de Oro”. No obstante, Zambrano ha recordado que “hace muchos años, ya Jaime Domecq y Lorenzo Díez, me dijeron que iban a entregarme el Caballo de Oro tras ganar una carrera, pero Miguel Primo de Rivera terminaba, ese año, su mandato de alcalde, así se me lo dieron a él”.

Cosas de la vida, Zambrano quedaba para mejor ocasión. Pero ayer tocaba gratitud más que otra cosa: “Quiero agradecer al Ayuntamiento, y a todas las personas que han apostado por su candidatura para ser Caballo de Oro 2012 (cada año se entrega premiando el año anterior), así como a todas las personas que se han preocupado por mi y que hoy me han acompañado en este acto emotivo. Un beso para todos”. Pero García-Pelayo reconocería que “muchos años después, se ha hecho justicia” y ha añadido “para mí fue una gran alegría poder llamarte esa tarde, y es verdad que te emocionaste”.

La alcaldesa, por su parte, comenzó su intervención haciendo referencia al lugar en el que se celebró este solemne acto: “Nos encontramos en el Depósito de Sementales, un espacio que recientemente hemos recuperado para la ciudad, y quiero agradecérselo al ministro de Agricultura, Miguel Arias, que nos acompaña en un acto tan especial, igual que hizo ya el pasado año, porque sin duda demuestra el compromiso del Gobierno de España con Jerez con hechos como la cesión de este magnífico equipamiento que en breve pondremos en valor”.

Un rato después, Arias Cañete, compartía con su esposa, Miqui Domecq, y amigos como Humberto Ibarra un rato agradable en una de las casetas que más sombrita aportaban a la hora de el calor. El sol apretaba y no estaba la cosa para el paseo pero quienes se atrevieron descubrieron a Antonio El Pipa, el prestigioso bailaor jerezano, como se dejaba envolver por el cariño de su gente bajo el porche de la caseta de La Borriquita. Manuel Serrano, el hermano mayor de esta populosa cofradía, no estaría muy lejos junto a un gran grupo familiar.

Olía ya a penúltima ocasión para el disfrute ferial y pronto comenzaría a dejarse ver el alcalde de La Barca, Alejandro López, y su pareja, o José Antonio Vázquez, jefe de gabinete de la alcaldía de El Puerto de Santa María, haciendo gala de esa elegancia que siempre lo caracteriza pero que se eleva a la enésima potencia cuando llega una fecha señalada como la del sábado de feria. Y además estaban los que agradecen que Jerez tenga la plaza de toros tan cerca del recinto ferial. A la hora taurina por excelencia no eran pocos los que realizan tan cómo tránsito.

Hoy es ya domingo y toca ir arremangándose las ganas porque la Feria del Caballo toca a su final. Ojo avizor hay que estar, no obstante, para que la recogida no se adelante en exceso. Precios más bajos, tanto en las casetas como en los cacharritos, aguardan como novedosos invitadores a que nadie haya dado por terminada su agenda de visitas al González Hontoria el sábado. Es buen día para poner colofón a siete días de disfrute tras los que no falta quienes ya se apresuran a preparar sus balances personales. Los institucionales también comienzan a pergeñarse.

Tiempo al tiempo. Ya tendremos ocasión para ello. De momento, a seguir disfrutando. Eso es lo que parecían asegurarse todos ayer. Mirar el catavino como si la fiesta estuviera comenzando, eso se imponía. Hoy será otra cosa.

(La Voz, 12-05-13)

sábado, 11 de mayo de 2013

La Feria del Caballo se adentra en sus días grandes con más gozos que sombras (Viernes de Feria)

El ambiente crece en el González Hontoria a medida que avanzan las jornadas.
El común de los mortales busca acontecimientos que nos contagien la alegría. Por eso la muchedumbre toma ya cada vez de forma masiva la Feria del Caballo. La proximidad del fin de semana puso ayer de manifiesto que los frenos laborales van encontrando pausas liberadoras y, por ello, pronto quedaron en entredicho las valoraciones que, desde el porche de la caseta, comenzaban a estimar que parecían mayores los gentíos ofrecidos por el González Hontoria en las primeras jornadas del acontecimiento. Desmontado a las primeras de cambio, todo confirmaba que, en efecto, era ya viernes.

Entre feriantes tan cabales como el abogado, profesor de la Universidad de Cádiz, multipregonero y analista sagaz de la realidad jerezana Enrique Víctor de Mora y Quirós, que reposaba junto a la familias las cargas sociales de tal abanico de méritos, las composiciones de lugar que la observación de los paseos a la hora del almuerzo generaban. “Mira, Mario Conde!”, dijo alguien cerca y allá que fue nuestro interlocutor a compartir unos instantes de interesante palabrería festiva. Nada que a su vuelta no enriqueciera aún más el vaticinio de una feria que volvía a atraer de modo singular.

La retranca del conocido graduado social Juan José Álvarez, también con su familia, o del periodista Álvaro Ojeda, con su repertorio de chanzas puestos al alcance de la tertulia, concitaron asimismo los mejores presagios de un rato de feria consagrado lo mismo a los sesudos análisis que, las más de las veces, a las veleidades sensitivas que procuran siempre los gozos de la convocatoria de estas fechas. “Vaya mes de mayo!”, suspiraban algunos adalides de las verdades del barquero compartidas entre cerveza y rebujito, que es demasiado el calor.

La Feria del Caballo de cesa de ofrecer momentos para el recuerdo. Y esas horas lo son especialmente para un disfrute de incomparable invitación a la comunicación más locuaz. Con quien sea, aun sin aparentes centros de interés comunes. Especialmente cómoda cuando, con copas de por medio, uno se acerca, por ejemplo, a mandos militares, a hombres ante los que, en condiciones normales, casi nos cuadraríamos sin pertenecer a cuerpo alguno que no sea el que se nos va cansando poco a poco con el paso de los días de feria.

Ricardo Hernández y Antonio Piñero, comandante de la Flotilla de Aeronaves de la Base de Rota y comandante del buque Juan Carlos I respectivamente, son un buen ejemplo. Son normales. Pues claro. Y en familia también, tan capaces de disfrutar sin levantar sospechas sobre las responsabilidades que en términos de defensa tienen a su cargo. Gente maja que deja la Villa y su espacio militar para venir a pasar calor al González Hontoria. En el parque todo invita, sin embargo, a ansiar un reparador bañito en las vecinas playas. Pero algo tiene la feria que atrapa de este modo.

Entre todas sus sugerencias, las casetas vuelven a erigirse en uno de los referentes más importantes. Por su comodidad interior y las lisonjas gastronómicas que compartimos. Bombones de fino y de Pedro Ximénez por ejemplo. Búsquense en Los Cabales. Pero también por el extraordinario trabajo en sus fachadas premiado por el Ayuntamiento con su anual concurso que ayer entregó los galardones a los designados: González Byass, La Piquera y La Crujía en los más importantes y Harvey, Los Pollitos y La Enjalma en los accesits.

Avanzan los días de feria entre gozos y sombras, pocas estas últimas. Medio millar de atenciones del puesto de la Cruz Roja han ido subsanando heridas leves, dolores de distinto tipo, intoxicaciones etílicas, un caso de disnea y diversos de malestar general, vómitos o crisis de ansiedad. Nada nuevo bajo el sol. La atención más grave, se produjo en uno de los concursos ecuestres, en el recinto Ifeca, cuando un caballo propinó una patada en el pecho a hombre de 47 años, que quedó inconsciente y tuvo que ser trasladado al hospital de Jerez por una posible fractura de la que va mejorando.

El sábado nos lleva irremisiblemente al Depósito de Sementales. Su vistoso pabellón regio acoge este mediodía la entrega del Caballo de Oro a Sebastián Zambrano Sánchez, espléndido y sencillo ejemplo de esas manos jerezanas que supieron domar animales para la monta como enseñar a quienes, desde edades tan tempranas, iniciaron el camino que los convirtió en reputados jinetes o amazonas. Merecido premio que reconoce que más allá de los grandes apellidos también hay vida fecunda por y para el animal que da nombre a la Feria. La prestigiosa estatuilla está muy bien concedida.

“Su dilatada trayectoria y su estrecha relación con el mundo ecuestre le hacen merecedor de este galardón”, dice Antonio Real. El delegado de Turismo, Cultura y Fiestas apunta que “a él debemos el que haya exportado el nombre de Jerez por toda España y por el extranjero”, y lo reconoce mientras camina por el paseo de Lola Flores revisándolo todo con su inseparable Antonio Montero, concejal del Plan Especial de Eventos Culturales y Festivos. “Será un acto muy emotivo porque le llega en plena madurez”, explica cuando alcanzamos el fin de semana y la muchedumbre toma el Real.

(La Voz, 11-05-13)

viernes, 10 de mayo de 2013

Los hermanos Miura y las bodegas Sánchez Romate reciben el Sombrero de Oro

El acto se celebró en la Caseta de González Byass (Templete Municipal)
La Asociación Sombrero Ala Ancha Jerezano entregó ayer, en la caseta de González Byass del recinto ferial del parque González Hontoria, sus anuales premios Sombrero de Oro que, en el empeño de reconocer los esfuerzos notorios por hacer prevalecer el uso de este castizo complemento, recayeron en esta ocasión en los hermanos Antonio y Eduardo Miura Martínez así como en la firma vinatera Sánchez Romate.

El acto, presidido por el conocido ganadero y bodeguero jerezano Álvaro Domecq que encabeza la entidad que otorga estos galardones, ha valorado la trayectoria en el mundo de la tauromaquia de los Miura, quienes además cuentan en sus antecedentes familiares con una fábrica de éste tipo de sombrero y siempre han defendido y divulgado esta costumbre tan andaluza.

Hubo intervenciones de Mauricio González-Gordon, el presidente de González Byass como anfitrión, quien resaltó cómo el mencionado sombrero ayuda a vender los vinos de su casa, circunstancia que también concurre en la empresa galardonada, que cuenta con un logotipo que representa también a un hombre vestido de corto y tocado por el sombrero de ala ancha.

También tomó la palabra Álvaro Domecq para agradecer la acogida de la firma con el vino más vendido del mundo, el Tío Pepe, y subrayar las virtudes de la familia Miura con los que reconoció disfrutar en su casa del tentadero de machos garrocha en mano. Tuvo palabras, igualmente, para las bodegas Sánchez Romate en cuyo nombre recibió el galardón Luis Díez, director de ventas nacional.

“Gracias a la fábrica de los sombreros que nuestra familia tenía en Sevilla se pudo ir disponiendo de dinero para luego dedicarse a la cría del toro bravo”, reconoció Antonio Miura quien, como su hermano Eduardo, hizo votos para que esta prenda tan característicamente andaluza no se pierda. “Es absurdo que, por comodidad no se vean sombreros en la calle”, añadió.

El evento contó con la presencia del concejal Javier Durá en representación de la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, del mismo modo que pudo verse en el templete municipal en el que instala su caseta González Byass en su condición de patrocinador de la Feria, a personalidades de la vida jerezana como los también ediles Antonio Real y Francisco Cáliz, Humberto Ibarra, Isaac Camacho o Paco Cepero.  

(La Voz, 10-05-13)

Equisur añade la visión comercial de la feria (Jueves de Feria)

Foto de La Voz
La búsqueda de los mejores ejemplares a resguardo se convirtió ayer en una realidad que poco tenía que ver con haber alcanzado en el parque González Hontoria las más altas temperaturas de cuanto va de Feria del Caballo. La puesta en marcha de Equisur, feria comercial que alcanza ya su vigésimo segunda edición en el intento de rescatar el contenido primigenio de una cita ganadera como ésta, brinda ya, en el palacio de exposiciones de la Ifeca, en el mismo recinto ferial, otro modo de disfrutar del animal que da nombre a la fiesta.

El presidente de la Diputación, José Loaiza, la alcaldesa, María José García-Pelayo, y el subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, junto con otras autoridades de diferentes administraciones procedieron al corte de cinta e inauguración oficial. A partir de ahora, 52 expositores que ofrecen productos relacionados con el mundo del caballo, que podrán visitarse hasta el domingo 12 atraen a los visitantes hacia ese ángulo del parque. Además serán 180 los ejemplares que competirán en el Concurso Morfológico de Ganado Selecto Caballar.

«Son eventos que tenemos que seguir potenciando, porque lo que hacen es crear economía en la provincia», ha dicho el presidente de Diputación convencido, sin embargo, de que siendo muchos los visitantes a estas instalaciones, serán mayoría quienes no aparten sus pies del albero. Hay mucho que seguir disfrutando sin salirse del camino que trazan los paseos que recuerdan, con sus nombres, a todos y cada uno de los más genuinos cantaores y cantaoras que ha dado la tierra. «Un motivo más para que los aficionados al caballo vengan a la feria de Jerez», dice por su parte la alcaldesa.

La actividad comercial se compagina con las diferentes pruebas del concurso morfológico, en las que se dirimirá a quien corresponde el título de campeones y subcampeón de cada una de las razas participantes y, de entre todos ellos, el mejor caballo del concurso que será reconocido con la prestigiosa distinción de Campeón de Campeones. La final de este certamen tendrá lugar el domingo 12, día de la clausura. En su largo periodo horario abierto al público, tanto las jornadas técnicas como las exhibiciones de primera hora de la tarde empiezan a generar interés.

Otros atractivos mantuvieron en vilo a los visitantes a esa hora en lugares bien distintos. La berza de la caseta del PP fue un ejemplo. Pocos espectáculos gastronómicos son capaces de conciliar la sencillez de unos ingredientes tan genuinos con la sofisticación de tan sólido plato cuando su elaboración da para la admiración de quienes fueron llamados al ágape. Una vez más políticos y periodistas de la mano a saber: María José García-Pelayo, Antonio Sanz, José Loaiza o Javier de Torre, entre los primeros, y María José Pacheco, presidenta de la Asociación de la Prensa, entre los plumillas.

Buen ambiente y calorías se dieron la mano por enésima vez en una Feria del Caballo que tenía ayer visitantes de lugares tan alejados como Castro Urdiales, villa cántabra que enviaba a una representación recibida como Dios manda en el Ayuntamiento, o la británica Liverpool. Éstos últimos, representante del City Central BID, rubricaron a mediodía el hermanamiento establecido con el Centro Comercial Abierto de Jerez. Colaboración, aprendizaje, estimulación de la iniciativa empresarial y, como no podía ser de otro modo, otro motivo para brindar en el González Hontoria.

La Asociación Sombrero Ala Ancha Jerezano entregó ayer, en la caseta de González Byass del recinto ferial del parque González Hontoria, sus anuales premios Sombrero de Oro que, en el empeño de reconocer los esfuerzos notorios por hacer prevalecer el uso de este castizo complemento, recayeron en esta ocasión en los hermanos Antonio y Eduardo Miura Martínez así como en la firma vinatera Sánchez Romate.

El acto, presidido por el conocido ganadero y bodeguero jerezano Álvaro Domecq que encabeza la entidad que otorga estos galardones, valoró la trayectoria en el mundo de la tauromaquia de los Miura, quienes además cuentan en sus antecedentes familiares con una fábrica de éste tipo de sombrero y siempre han defendido y divulgado esta costumbre tan andaluza.

Hubo intervenciones de Mauricio González-Gordon, el presidente de González Byass como anfitrión, quien resaltó cómo el mencionado sombrero ayuda a vender los vinos de su casa, circunstancia que también concurre en la empresa galardonada, que cuenta con un logotipo que representa también a un hombre vestido de corto y tocado por el sombrero de ala ancha.

También tomó la palabra Álvaro Domecq para agradecer la acogida de la firma con el vino más vendido del mundo, el Tío Pepe, y subrayar las virtudes de la familia Miura con los que reconoció disfrutar en su casa del tentadero de machos garrocha en mano. Tuvo palabras, igualmente, para las bodegas Sánchez Romate en cuyo nombre recibió el galardón Luis Díez, director de ventas nacional.

«Gracias a la fábrica de los sombreros que nuestra familia tenía en Sevilla se pudo ir disponiendo de dinero para luego dedicarse a la cría del toro bravo», reconoció Antonio Miura quien, como su hermano Eduardo, hizo votos para que esta prenda tan característicamente andaluza no se pierda. «Es absurdo que, por comodidad no se vean sombreros en la calle», añadió.

El evento contó con la presencia del concejal Javier Durá, en representación de la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, del mismo modo que pudo verse en el templete municipal en el que instala su caseta González Byass en su condición de patrocinador de la Feria, a personalidades de la vida jerezana como los también ediles Antonio Real y Francisco Cáliz, Humberto Ibarra, Isaac Camacho o Paco Cepero.

(La Voz de Cádiz, 10-05-13)

jueves, 9 de mayo de 2013

Cuando se vive la feria en femenino plural (Miércoles de Feria)

Foto de Víctor López - LA VOZ
La Feria del Caballo cruza hoy el ecuador de esta semana dada a la efervescencia lúdica y al ocio baladí. Y lo hace tras dejar atrás esa jornada entregada a la causa de las mujeres que constituye el miércoles que el González Hontoria suele vivir en femenino mal que les pese a quienes no entienden que la filosofía de género impregne algo tan destinado a vivirse de modo general como la fiesta de cada mayo. Pero, sí o sí, el día de ayer era para admirarlas y cualquier rincón era bueno para descubrirlo. En grupos generosos en número y disfrute llegaron al parque y éste agradeció tal despliegue.

Fueron la señoras de los paseos. Y, sobre el albero, compusieron escenas memorables en las que bastaban unas palmas y un poco de cante por sevillanas para dar contenido a un día espléndido en el que de nuevo el calor fue meteorológico y humano, vital y físico. Por ello, el ambiente festivo que la mujeres saben imponer a la feria se adueñó de todos cuantos, del género que fueran, supieron sumarse a la fiesta del jaleo sin medida y la alegría superadora de las dificultades actuales. Si la feria es el marco en el que evadirse sin dudarlo, ellas son las que mejor lo hacen siempre.

En las casetas, dejando fuera el bochorno climatológico, y mientras el delegado de Turismo, Cultura y Fiestas apunta que en el Ayuntamiento se saben “conscientes del impacto de nuestra Feria como reclamo para captar potenciales visitantes”, todo apunta a que la ambiciosa campaña de promoción que señala el concejal Antonio Real ha dado sus frutos tras haberse puesto en manos de touroperadores, agentes y empresarios turísticos nuestra oferta de forma que se puedan dar las reservas oportunas para venir a Jerez con éste o cualquier otro motivo”. Así sea.

Tras ello, y consciente el delegado de que, este año, “el cartel es realmente un reflejo de lo que es nuestra fiesta, una explosión de color y una serie de elementos como el caballo, las casetas, los farolillos y el albero que identifican la Feria de Jerez”, llega el momento de encontrar en el interior de una de esas casas el sentido de una semilla a punto de germinar en cuanto pase esta semana del González Hontoria: la Romería del Rocío. No son pocas las que apuntan a ese sentimiento tan genuinamente jerezano, pero la de ‘El Viejo Simpecao’ aglutina los más notorios empujes al respecto.

Marco Antonio Gómez, presidente de la peña, encarna no solo el perfil del jerezano capaz de hacer aguantar los botos y el traje corto hasta que llegue el momento de retirarse la chaqueta de mil rayas y el exuberante pañuelo del bolsillo sino la estampa de quien asegura por la fuerza de los hechos que hay que vivirlo todo tan intensamente como el ciclo festivo nos permita. Lo acompañan, en su caseta, tanto compañeros de Cope-Jerez como de la entidad rociera que encabeza y apuesta de suyo, con tanta contumacia como sensatez, por aquello que está por venir.

El director comercial de la cadena radiofónica, Juan Carlos Sambruno, y compañeros como Nuria Riba, David Oliva o Vanesa Carribero, por no dejar de lado a otros como José Manuel Cabrales, Diego Yesa o Manuel Montenegro conocen bien el paño y saben disfrutarlo. Como los peñistas Mariano Tizón, Luisa Bellido, las hermanas Quirós u otras fervientes de la caseta como Vanesa Herrera. Isabel Moreno, Inma Romero o Laura Ramírez. Es el día de las mujeres y precisamente ellas saben bien como pasarlo como Dios manda.

No está lejos un conocido del mundillo futbolístico jerezano como Vicente Moreno, alma mater de la plantilla del Xerez Club Deportivo de la temporada en Primera División, quien recibe de mil amores, mientras toma copas con un grupo de amigos, los buenos deseos de que el primer club de la ciudad no desaparezca. No en balde, Jerez comenzó su Feria del Caballo sufriendo el descenso matemático a Segunda División B. El González Hontoria sabrá enterrar estas penas azulinas o cualesquiera otras con las que se haya llegado a la anual cita festiva.

Real sigue a lo suyo, reconociendo que estamos en una feria “simplemente única”, que “Jerez reúne una serie de condiciones para que su convocatoria de cada mayo sea singular y exclusiva”. Mientras tanto, gente como Marco Gómez, hace realidad la tarjeta de visita del jerezano dispuesto a que los visitantes del González Hontoria no se queden impávidos ente el espectáculo que bajo el sol de mayo les aguarda. “En cualquiera de nuestras casetas, abiertas a todo el público, nuestros recién llegados podrán saborear la gastronomía y los vinos de Jerez y disfrutar del flamenco de la tierra”, señalan ambos.

Las papas con chocos son, en ‘El Viejo Simpecao’, para chillarles, como la sopa de tomate, los pimientos fritos o simplemente las tortillas. Pero también en ‘Usted perdone’, ‘Las Angustias’ o ‘La Posada’. Cuestión de encontrar el rincón en el que estar a gusto. Poco más. Y si ello se busca “a mediodía y hasta que el cuerpo aguante”, como reconoce Antonio Real su feria, las cosas dejan sitio para una mañanita de trabajo, que aún hay que cumplir con ello hasta que lleguen los días grandes, y una noche para llegar prontito a casa, que hoy jueves hay agenda también amplia a la que rendir tributo.

La Doma Vaquera sigue su curso en el Depósito de Sementales y los rejones de Fermín Bohórquez, Ventura y Manuel Manzanares se enfrentan a toros de la ganadería del vástago del primero de estos caballeros preparados ya para adentrarse en el redondel del coso taurino de la jerezana calle Circo.

(Publicado en La Voz de Cádiz, 09-05-13)

miércoles, 8 de mayo de 2013

Los caballos tomaron posesión de su feria (Martes de Feria)

Foto de cadizturismo.com
El martes de feria elevó al protagonismo que se merece a aquél que bautiza la fiesta jerezana de cada mayo. Hasta que los caballos no han llenado los paseos del parque González Hontoria no ha alcanzado su verdadera dimensión la convocatoria que Jerez propone todos los años por estas fechas. Los jinetes a lomos de tan cuidados animales como ayer recorrían el recinto y los enganches que lo cruzaban imponiendo la cadencia de unos cascabeles capaces de convertirse en la mejor banda sonora fueron los protagonistas de una jornada luminosa que acompañó a semejante espectáculo.

Breaks, carretelas, faetones, jardineras, calesas... Los tipos de carruaje más genuinos en nuestra tierra se llevaron las miradas de quienes no necesitan tomar asiento en estos enganches, tirados a la limonera o al medio tronco comúnmente, para sentirse paseados sobre un albero que, a la hora de más calor y repitiendo las máximas del día anterior, parecía el causante de la gracil elevación de las manos de los équidos. Por lo demás, la elegancia tan natural a bordo de las cuatro ruedas no dejaba atrás la que emanaba de la estampa de jinetes y amazonas, más de los primeros, que montaban a la vaquera.

Las luces son capaces de causar una ilimitada admiración, los buenos precios en casetas y cacharritos pueden animar el consumo, el establecimiento de un moderno centro de prensa en pleno ferial ayuda a la difusión de los encantos de la cita festiva o puede avanzarse en artilugios como la aplicación de móvil para la localización de niños perdidos en la Feria del Caballo. Pero nada de eso cobra sentido hasta que los caballos no toman posesión de lo que es suyo. Y, en el solemne momento de los primeros golpeos de pezuña sobre el albero vividos ayer, todo lo demás pasa a segundo plano.

Para los niños, el martes de feria tenía otros atractivos muy capaces, sin embargo, de competir abiertamente con la belleza del paseo caballista. Llegó el primero de los días de cacharritos más baratos y, aunque no son ellos los que se llevan la mano a la cartera, sí notaron algo especial en unos padres muy dispuestos a pasar por la Calle del Infierno seducidos por la equívoca convicción de poder despachar de una tacada las necesidades de los hijos en esa ruidosa parte de la feria. Se notó, con todo, que aún quedaba una segunda jornada barata que este año se estrena. Pero el domingo queda lejos aún.

La bajada al euro y medio en la que quedaba la generalidad de las atracciones ayudó al dispendio paterno. Pero a los niños, que ya acompañaron en cifra significativa a la alcaldesa María José García-Pelayo en el encendido del alumbrado, no se les engaña y, aunque no sabían mucho de cuánto se ahorraba la economía doméstica sí tenían claro que las vueltas no duraban lo mismo. Cosas de aquellos trapicheos tan genuinamente feriales. Y si ciertos engañabobos propios de nuestra fiesta de mayo merecieron la poesía de José María Pemán, quién se atrevería a ponerle pegas ante los críos.

“Es una feria solidaria”, dice la regidora. Así sea en estos tiempos en los que contemplar con alegría la presencia de personas de caseta en caseta, gastando con moderación pero dejándose sus eurillos mientras el calor azuzaba en la hora punta. Más de uno se acordaba, mientras el sol castigaba, del helado ‘de feria’ que una pastelería del centro de la ciudad anuncia en su escaparate. El sorbete, elaborado con rebujito y tan seductor de las necesidades de refresco como de los paladares que no quieren apartarse de aquello que el Hontoria guarda para sus visitantes, es todo un invento.

Más habitual es que los políticos dejen aparecer su generosa invitación en comidas con los periodistas en las que prolongar una relación de suyo necesaria. Dos de las profesiones peor vistas de un tiempo a esta parte se dieron ayer la mano, para olvidar las penas seguramente, en convocatorias en sus respectivas casetas de socialistas, pachequistas y andalucistas. El póquer lo completarán mañana jueves los populares en el Gobierno municipal jerezano. Ayer fue la ocasión de que la oposición se estirara, hasta donde les es posible. Pero no faltó ni jamón del bueno ni langostinos tigres.

Lo demás lo pondrían referencias más sutiles de lo habitual durante el año, y acompañadas de gracieta si es posible, a las cosas “que los demás hacen mal” o la locuacidad del exalcalde Pacheco apartando quizá de su memoria la sentencia que le aguarda en breve. Para todos tiene tregua una Feria del Caballo que incorpora hoy miércoles el Depósito de Sementales, antiguas y vistosas instalaciones junto al González Hontoria recién revertidas por el Ministerio de Defensa a la ciudad, que acogen el Concurso de Doma Vaquera.

A lomos de la evasión siguen los jerezanos y visitantes en medio de una realidad cuajada de belleza por doquier allá donde uno detenga la mirada. Hoy, por ejemplo, se incorporan las mujeres en esos grandes grupos habituales de cada miércoles de Feria. No han faltado en el parque pero se harán notar mucho más. Mientras tanto los caballos son siempre un buen destino de nuestra atención. Entre copa y copa, sus evoluciones también emborrachan de emociones impagables. Ellos han tomado posesión de la feria y ya no la dejarán hasta que llegue el próximo domingo.  

(La Voz de Cádiz, 08-05-13)

martes, 7 de mayo de 2013

La luz se hizo en el González Hontoria (Lunes de Feria)


Aspecto del recinto recién encendido el alumbrdo.
 El firmamento encendido que cubre el parque está listo para alumbrar durante esta semana tanto la evasión de los jerezanos, tan necesitados de ello, como la admiración de los visitantes, a los que se espera como agua de mayo. El millón de bombillas del recinto del González Hontoria comenzó a brillar formalmente anoche para dar por inaugurada una Feria del Caballo en la que este año se han vuelto a poner grandes expectativas. Y María José García-Pelayo, la alcaldesa de Jerez, fue portavoz de ellas recién pulsado el botón protocolario que apiñó los buenos deseos.

La regidora ha asegurado que es la ocasión para Jerez de “reivindicar a nivel internacional su rico patrimonio cultural y festivo en la cita que mejor reúne la idiosincrasia de sus raíces más personales”. Acompañada de la práctica totalidad de los miembros del Gobierno municipal, insistió en la vocación del Ayuntamiento de “primar un año más la atención a todos los servicios implicados para que el desarrollo de la fiesta cumpla los requisitos de seguridad, limpieza y calidad estética acordes a un evento calificado de Interés Turístico Internacional”.

Pórticos, arcos, guirnaldas y proyectores ya se asomaron, en parte al menos, durante este pasado fin de semana aprovechando la presencia en la zona de los aficionados a las dos ruedas. Pero el regusto del estreno no se perdió para una inauguración que provocó en la masa ingente de personas prestas a cogerla por la punta la admiración de quienes percibían la recuperación de las trazas de siempre para los diseños. Las necesidades de recortes camuflaron los cambios del año pasado en novedades que no terminaron de gustar. Pero esto, y a la vista está para los visitantes del Hontoria, es otra cosa.

Tres millones y medio largos de watios cuantifican un despliegue que, sin sabor a derroche, sí apuntan voluntades de mejora. Hasta la anunciada recuperación de los fuegos artificiales para el año que viene llega con vitola de brote verde para una fiesta a la que tampoco es que le hagan falta promesas que no sean las que garanticen que, desde aquí hasta el domingo, habrá ocasión de olvidar los malos tragos. Aunque sea en base a sustituirlos por esos otros que, en catavino o vaso en función de como vengan las temperaturas, ayuden a cruzar el umbral de las preocupaciones.

Los 30 grados de máxima registrados a lo largo del día de ayer en la ciudad ya apuntan a qué tipo de feria nos estamos acercando este año. Y, aunque la simpleza de semejante clasificación, ‘de vino’ o ‘de cerveza’ en función de lo que el calor requiera, no debe empañar la clase del jerezano que tomando el catavino con el pulgar y el índice por la base gusta de pasar la calorina sin perder la compostura ni su elegancia, lo cierto es que todo apunta a que el cielo retará este año los buenos usos y los tragos pueden ser buscados con efectos más refrescantes. Tiempo al tiempo.

Otra lesión a la costumbre. Las sensaciones del momento formal del encendido estaban ya más que testadas. Y no solo por el fin de semana motero que avanzó el fluido eléctrico decorativo. Todo el día de ayer estuvo trufado de primeras catas y reencuentros personales, familiares y empresariales con la cita de cada mayo. Las casetas, que este año preparan precios especiales y ofertas para que el domingo de Feria no languidezca como viene ocurriendo en los últimos años especialmente, ya han comenzado a hacer caja en la confianza de que siga la fiesta.

Tras las citas inaugurales convocadas por asociaciones, hermandades, peñas y demás colectivos para el mismo fin de semana, el mediodía de ayer, toda vez que la Feria estaba aún por encenderse protocolariamente llegada la noche, también contuvo numerosas comidas de empresa, de amigos o de socios de caseta. Un ejemplo, ‘Los Cabales’. Ese puñado de bien traídos feriantes, unos setenta comensales en torno a la larga mesa preparada en su caseta del Paseo de Lola Flores, dedicaban un homenaje al Colegio de Abogados de Jerez en su 250 aniversario fundacional.

Tampoco la zona de las atracciones se vio falta de ambiente, aunque no son pocos quienes se han reservado para hoy. Este martes es Día de los Cacharritos, para goce y disfrute de los más menudos visitantes de la Feria del Caballo. Y la consideración de los precios más bajos sigue siendo, por mucho que el año que viene regresen los fuegos artificiales, argumento de cabecera para unos padres realistas que se saben en el punto de la crisis en el que nos encontramos. Salvo que las colas les superen, que también puede ocurrir. Este año habrá una segunda jornada el próximo domingo.

Y más allá de los cacharritos, donde la cruda realidad de los acampados que viven de la venta ambulante y otras actividades tan necesarias para que estas familias de españoles, portugueses y rumanos salgan adelante se visibiliza de modo menos elocuente, tocaba puesta en marcha del plan de atención que la delegación de Bienestar Social ha mejorado este año. Folletos trilingües esperan ayudar a que los asistidos conozcan los servicios que se pone a su alcance bajo el lema ‘Di no a la mendicidad infantil’. Luego se hizo la noche. Y con ellallegó la luz. La Feria del Caballo está en marcha.

(La Voz de Cádiz, 07/05/13)