Pongo la mano en el fuego

Foto de Esteban.

Ignacio García Pomar, sí señor. El bueno de Tacho es el elegido para pregonar en Jerez la Semana Santa de 2012. Mañana viernes será presentado en la sede de la Unión de Hermandades a las cinco y media de la tarde. Entonces le daré el abrazo que hoy me ha quedado pendiente.
No tenemos nunca gran contacto pero siento tal comunión personal con su modo de vivir y sentir lo cofrade que ya me emociona la idea de su presencia en Villamarta el próximo Domingo de Pasión. Gente así ante el atril del Pregón es garantía de honradez de pensamiento.
Me dijeron en su día que, cuando me nombraron pregonero en 1999, dijo algo así como que conmigo aguardaba a la ciudad "un pregón en estado puro". Bueno, pues aquel exceso en boca de García Pomar, este jerezano de la cosecha del 66, no lo será en la mía. Ahora sí, querido Tacho.
Está casado, tiene dos hijos, es licenciado en Económicas y empleado de banca y está finalizando la licenciatura de Historia del Arte. Es cofrade de la Sagrada Cena, el Nazareno, la Soledad, la Clemencia, Amor y Sacrificio, la Entrega (Guadalcacín) y la Virgen de la Cabeza (Picadueñas).
Ofreció el pregón de la Semana Santa de Bornos (2007), el de la peña cultural del sevillano Polígono San Pablo (2004) y el de La Entrega en Guadalcacín (2007). Ha intervenido en mi Consuelo del Pelirón, el Nazareno y en mesas redondas en las hermandades de la Coronación, la Soledad y Desconsuelo.
Es comprometido, serio y capaz, veraz y sensato, directo y sencillo, cordial y esperanzado, valiente y eclesial, devoto y culto, alentador y trabajador, cristífero y mariano, entregado y penitente, cofrade y cristiano a carta cabal, a ciencia cierta, a pies juntillas. Por él, pongo la mano en el fuego.