martes, 27 de diciembre de 2011

Los consumidores aprovechan el festivo y llenan los comercios

Foto de Javier Fergo
La salida del fin de semana de la Nochebuena y la Navidad tuvo un efecto verdaderamente balsámico en el sector comercial de la ciudad, que había venido siendo atendido de modo dispar a lo largo de las jornadas similares a la de ayer que, entre puentes y fines de semana, ya se habían registrado con anterioridad a este festivo traslado al lunes. Y la oportunidad de que los usuarios de las diversas modalidades de comercio existentes en Jerez completarán las compras navideñas para cuanto resta de las fiestas, recién salidos del primer envite, fue todo un éxito.
El efecto del domingo de comidas familiares y celebraciones propias de cada 25 de diciembre que acababa de quedar atrás se hizo patente, sin embargo, en el inicio de una actividad comercial que «ha arrancado un poquito tarde», reconocía ayer Fernando García, el presidente de la asociación de comerciantes Acoje, a primera hora de la tarde. Lo pudieron constatar quienes acudieron pronto a los centros comerciales y pudieron hacer sus compras con una tranquilidad sospechosa de día sin resultados óptimos para un sector necesitado del impulso.
No fue hasta llegado el mediodía, con todo, que la respuesta del público alcanzara el caudal que todos esperaban. Pero a partir de ahí comenzaron a llenarse de gente las grandes superficies, repletas pronto de clientes buscando todo aquello que requerían. Consecuentemente, los aparcamientos fueron testigos de unas colas especialmente llamativas, por ejemplo, en los accesos a Luz Shopping y Área Sur desde la circunvalación. El día comenzaba a prometer y ello no se quedaba solo en el extrarradio. También el comercio tradicional se vería beneficiado.
También el tradicional
En un 80 por ciento se calculaba aproximadamente la respuesta de las tiendas del centro que decidieron abrir sus puertas para la ocasión. Aunque éstas no comenzaran realmente a ser franqueadas con evidente animación hasta pasadas las doce del mediodía. «Pero se ha visto bastante público en el centro», reconocía Fernando García para quien era importante que «el comercio ha cumplido con la mayoría de las tiendas abiertas». «Esperamos echar un buen día», añadía cuando ya era una evidencia que la cosa marcharía.
Pese a ello, el presidente de Acoje no obviaba la realidad de que «se ve actividad aunque con esa cierta tranquilidad mostrada ya sobradamente a lo largo de estas fechas atrás, con la gente dando muchas vueltas antes de comprar». Pero se hizo caja. Y ello fue reconocido tanto desde esta asociación de comerciantes como desde la otra con presencia en la zona, Asunico. «He visto a mucha gente en la calle, lo que pasa es que hay comercios que no han abierto», señalaba Manuel García, el presidente de esta otra entidad que los asocia.
La convicción de que todo podría haber ido mejor con un pleno en la apertura de las tiendas del centro no ocultaba, sin embargo, la rotundidad del presidente de Asunico: «Yo estoy satisfecho con la gente que veo en la calle, claro que estoy satisfecho», añadía. La situación era buena, por tanto, en el centro como en el extrarradio más pujante y nuevo. Y en éste otro caso, más allá de la comodidad de Luz Shopping porque también otras grandes superficies de la ciudad como lo son Hipercor o Carrefour contaron con su correspondiente público.
Terrazas llenas
Las sinergias llegaron también a la hostelería. Los bares se llevaron su tajada igualmente. Los establecimientos asentados en las calles Larga y Lancería o en la plaza del Arenal tuvieron que esperar a que el sol del mediodía despuntase pero sus terrazas se llenaron en muchos casos. El aperitivo se dio la mano con las compras para redondear una jornada digna de la satisfacción de quienes necesitaban que este despunte tuviera lugar. Grupos de personas tomando una copa con las bolsas junto a la mesa y hasta familias comiendo fueron testimonio de ello.
La constatación de que la crisis no contiene a los consumidores tanto como se pudiera llegar a temer alienta, por tanto, a los comerciantes, y especialmente a los del centro que son la verdadera 'cenicienta' en el reparto habitual de la clientela. Con esperanzas bien fundamentadas afrontan, pese a todo, este tramo de ventas navideñas que les resta durante esta semana y, sobre todo, en el camino de la noche de Reyes que aún les depara también la semana siguiente. Luego llegarán las rebajas. Pero ahora no se piensa más que en esta campaña.
(La Voz, 27-Diciembre-2011)

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