Una de las actuaciones de la banda. |
Si se ausentan de su cita dominical con los jerezanos, como ha llegado a ocurrir por no disponer de las sillas para los conciertos, se les echa de menos. Pero hay razones de más peso para que, llegados al caso, no se cumpliera con la premisa de poner la buena cara de la música ante el mal tiempo que la crisis impone. Los miembros de la Banda Municipal no cobran sus becas desde que percibieran las correspondientes a mayo de 2011. Pero ni los cinco meses no cobrados (julio y agosto son inhábiles) les hace faltar a su compromiso.
«La banda fue creada en 1930 con funcionarios del Ayuntamiento, independientemente de que estuviesen educando y hubiese colaboraciones externas», recuerda Juan Pedro Martín, uno de los tres miembros del Consejo de Becados de la banda evocando un estatus que hace tiempo quedó en el recuerdo. «El caso es que siempre ha tenido una asignación por parte del Ayuntamiento que, hace unos 25 años y ante la necesidad de regulación, adquirió las trazas de becas a la formación», añade quejándose no solo del retraso notable que sufren.
Tienen asignadas cantidades individuales en función de tres niveles reconocidos entre ellos en función de la profesionalidad musical demostrada. «La beca A era de 60.000 pesetas, la B de 45.000, y la beca C eran unas 20.000 ó 25.000 pesetas que llegan hoy, aproximadamente, a los 360, 270 y 150 euros», explica. El problema, además del retraso, es que «desde hace 20 años nunca más se ha vuelto a revisar, lo único que ha cambiado es el nombre, beca a la formación, y que ahora es en euros», detalla.«No es culpa ya de la actual administración, sino de la anterior y de la que estuvo antes; los problemas de atrasos se han venido sucediendo siempre», explica Martín esperanzado con los resultados de la reunión mantenida hace unos días con la alcaldesa y los concejales de Cultura y Promoción de Eventos. «Como no somos una concesionaria sino la banda que creó el Ayuntamiento de Jerez para realizar una actividad dirigida y ordenada desde ahí, lo que queremos es el mismo tratamiento que tenga el personal municipal» señala.
La misma fecha en que están cobrando los empleados del Consistorio, que por el retraso es el problema que moviliza al grueso de la plantilla, ya sería para los músicos un alivio. A ello se ha comprometido el gobierno local pese a que, como reconocen, «la Banda Municipal no despierta alarma social como otros colectivos». Pese a ello, el portavoz recuerda que están en juego alquileres de piso de estudiantes, desplazamientos de músicos de Trebujena, Sanlúcar o San Fernando o, incluso, pagos de plazos que han de afrontar sus miembros.
(La Voz, 15-Enero-2012)
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