viernes, 8 de enero de 2010

Y ahora las de Aguilocho



Desde hace tiempo me llama GAL, acróstico de mi nombre que nació en aquellos tiempos de colaboración de mi entrañable Ángel Rodríguez Aguilocho con la programación cofrade de Cope-Jerez coincidentes con la famosa acción antiterrorista igualmente llamada y atribuida al Gobierno socialista de Felipe González.
Eso es lo de menos a los efectos de lo que quiero contarles: el encuentro en la calle Santísima Trinidad, cercana ya la carroza de la Ofrenda del Oro de la recientita Cabalgata de Reyes a la calle Medina. Fue entonces cuando lo escuche desde la acera: "¡GAL, GAL...!" Me giré y me lo encontré con Blanca, su mujer, y con su cámara.
A él debo la foto del final de la Peregrinación Andando que, con la evidencia del cansancio y de la espiritualidad recrecida con aquella otra experiencia del pasado noviembre, lleva un tiempo como cabecera de este mi blog. Ahora le debo estas otras que ya le agradecí con la correspondiente lluvia de caramelos. Y con mi recomendación para Melchor, claro.

1 comentario:

  1. Que tiempos aquellos GAL... Es para mi un honor que una fotografía hecha con mi torpe cámara sirvan de cabecera de tu blog
    La foto fue facil. Llevabas la alegría en la cara...
    Un abrazo

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