Dios te quiere, pregonero

Tres días y pico faltan para que el pregonero se agarre al atril del Teatro Villamarta. En capilla nos hablaba, tras el programa del pasado lunes y cuando haber cruzado el umbral de la medianoche incrementaba la complicidad, de las buenas y las malas palabras que ha recibido un año más la persona encargada de exaltar oficialmente nuestra hermosísima Semana Santa.
José Antonio Zarzana es hombre trabajador. Enólogo para la empresa privada. Un hombre de planta y jerezanía, de hechuras y gusto, pero una persona que se busca la vida recorriendo el mundo, harto de aviones y henchido de sobreesfuerzos que a menudo no entienden más de cuatro. Él me hablaba de alguna desafortunada proclama y yo le recordaba las mías de hace doce años.
Hoy tengo otra que contar. La editorial que le dedicaba en directo el pasado lunes en el cuarto 'Carrera Oficial' de la serie especial cuaresmal, colgada en mi blog público, ha recibido un comentario preso de conclusiones apresuradas y manifestas intolerancias con las formas cofrades ásí como generalista sobre una dependencia laboral municipal que es agarradera del sectarismo ateo.
Ni José Antonio Zarzana es como alguno le ha dicho en la calle ni los pregoneros en general como el bloguero intransigente e insensato se ocupa de vocear con desestructuración mental y literaria. Ya está bien de estereotipos en un mundo que, a duras penas, se abre al mundo con renovado tono y siempre al servicio de nuestra sociedad.
Así comenzamos hoy 'Carrera Oficial', rompiendo lanzas por gente como José Antonio que, el domingo en Villamarta, se ocupará de despachar, como Dios manda, un encargo que recibe con honra y con ilusión, sin apellidos pero con nombre propio, a la altura que su talla intelectual sugiere y, por supuesto que también, con la planta, la elegancia y el porte que le caracteriza.
¡Viva tú, José Antonio! ¡Villamarta te espera! ¡Viva tú, querido amigo redescubierto durante estos meses! Como a mí me metieron en el bolsillo un crucifijo de plata en la sacristía de San Miguel hace doce años, yo meto mano en tu corazón para dejarte mi mensaje a tres días y pico del Pregón de la Semana Santa 2011: "¡PREGONERO, DIOS TE QUIERE!".
(Cope-Jerez, editorial en 'Carrera Oficial', 6-Abril-2011)