Esta semana se ha convertido en una locura. El descanso navideño de Manolo Estevez -a mí me tocará la semana próxima, ya les contaré por qué- me ha dejado, en Cope-Jerez y en solitaro, con mi magacín 'La Mañana en Jerez', con todas las ediciones informativas locales de la radio y con ese regalo de web que se llama cope.es y a cuya sección 'Mi ciudad' -marquen luego Jerez- hay que dedicarse en cuerpo y alma para conseguir el nivel de actualización que ostenta. Si a ello sumamos que se han tratado de unos días tremendos en los que fue preciso atender los efectos de la intensa lluvia en la ribera del Guadalete, el pleno de los Presupuestos Municipales para 2010 y alguna otra cuestión de interés llegamos al resultado que lamento.
Por ello llevo días sin actualizar este blog. Y, si bien lo siento siempre, en estos momentos más aún. Baste recordar que ha sido en esta semana cuando esta bitacora en la que volcar mi pensamiento cotidiano ha cumplido su primer año. El aniversario real fue el pasado día de los Santos Inocentes. Pero lo asimilo al fin de año y, ahora que me he quedado algo tranquilo aunque sea preludiando el ajetreo de la última cena del año y las uvas posteriores con que recibir el 2010, es cuando me reencuentro conmigo mismo. Eso es, en definitiva, entrar en http://elblogdegabrielalvarez.blogspot.com. Ahora llega, como fiesta de cumpleaños desplazada al fin de semana más próximo, el instante de recapitular.
Las cifras lo dicen: 1 año, 26 seguidores, 300 entradas, 24.000 visitas. Ni mucho ni poco ni todo lo contrario. Plataforma suficiente como para creer que mereció la pena el intento o puro empeño sin más de que quede escrito lo que ya no hay papel prensa que recoja, lo conseguido es el aliento que proporciona saberse seguido y querido, apreciado e incluso odiado, leído aunque sea por si las moscas y facultado, por cuanto abrí mi alma, para exigir claridad y transparencia a cuantos, más cerca de mí o menos, se propongan seguir visitándome. Gracias a todos.
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