'La Piquera' con la que, cada día, termina 'La Mañana en Jerez', que conduzco para mis oyentes en Cope-Jerez, ha traído hoy la retranca de Francisco Aleu. Tiene gracia cuanto dice porque a su chispa característica -se trata de uno de los periodistas jerezanos al que he visto titular mejor- une la enjundia de cuanto analiza. No da puntada sin hilo y eso es de agradecer, sobre todo cuando se da la mano con estilo tan fresco.Pues resulta que hoy se ha dedicado a la afición patria por los puentes. Se une una fiesta con otra por mor de un día tonto en el que lo mejor, pensamos casi todos los mortales, es no ir a trabajar. Conclusión: todos los que pueden, claro, allá que se solazan en el charco de un asueto porque sí. Cuando mi abuela Angustias, tan recordada, decía aquello de "¡levántate, perezoso, que la fortuna te llama...!" debía pensar en ellos.
Haciendo el parangón con aquella peli que dotó de perfil tan distinto de lo habitual a Javier Bardem -'No es país para viejos'-, bien que podríamos decir que España, en efecto, no es país para gente productiva. Y no creo que me deje llevar por malarate alguna fruto de que a mí me ha tocado trabajar. Al fin y al cabo siempre me toca. Que luego nadie se extrañe de que me pegue más de cuarenta días seguidos de vacaciones en verano.
Pero mi sensación es tan extraña durante los puentes que no puedo sino tenerles un poco de miedo. Son una especie de dragón que nos fagocita para vomitarnos una vez ha pasado todo. Y, mientras tanto, aquellos que no fuimos comidos por el 'bicho' -por haber trabajado- notamos que hemos pasado, con más pena que gloria, por estos días raros donde los haya. A ver si llega ya el miércoles y todos estamos el pie del cañón. Y muerte al 'dragón' del puente.
(Foto: Puente del Dragón, en Alcalá de Guadaira)
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