El retraso del concierto con la Junta mantiene cerrado el centro de autistas

Centro en Puertas del Sur para personas afectadas por el trastorno.

La ciudad dispone de un centro construido hace unos meses para 24 personas adultas con autismo que podrían ser atendidas de modo presencial y otras 25 en unidad de día, más todos los pequeños afectados. Pero no puede utilizarse porque sigue pendiente de un concierto con la Junta de Andalucía. «La crisis impide que llegue y esto nos tiene angustiados, no podemos tener vacío un equipamiento de esta naturaleza», se queja Isabel Pérez Aguirre, presidenta de Autismo Cádiz, la asociación provincial que atiende a quienes sufren estos trastornos.
Se estima que, en la actualidad, una de cada 150 personas encuentra sus relaciones sociales marcadas por esta afección, lo que elevaría a unos 4.000 jerezanos los que tendrían algún tipo de autismo. Cualquier análisis por primario que resulta pone en evidencia, por tanto, las grandes limitaciones que el conjunto de plazas del nuevo centro ofrecerá cuando entre en funcionamiento. Pero lo peor es que ni siquiera ésas que capacitan las nuevas instalaciones, ubicadas en la avenida de Puertas del Sur, pueden ponerse aún al alcance de aquellos que tanto las necesitan.
«Se trata de un conjunto de personas que, con o sin retraso mental, tienen, sobre todo, problemas para poner en marcha sus habilidades sociales, para el lenguaje, para las relaciones humanas, para entender esta sociedad y para entender al que tiene enfrente», dice la presidenta. Son niños que son incapaces de sostener la mirada, de jugar con otros niños o, simplemente, de relacionarse con su madre. «Una persona con autismo, aunque tenga otras habilidades y no tenga retraso, lo tiene muy complicado en el colegio, en el trabajo o en las relaciones de pareja», lamenta.
Autismo Cádiz tiene otros centros funcionando en otros lugares de la provincia como el Campo de Gibraltar. Pero las instalaciones de Jerez, construídas gracias a fondos procedentes de los Planes E siguen sin ser inauguradas y con las 80 familias asociadas a la espera. De momento han de conformarse con un piso que, en la ciudad, permite ofrecer a los niños autistas atención temprana.
(La Voz, 09-Abril-2012)